La Dulcesquad lo estaba esperando como agua de mayo: el vídeo del viaje a Ibiza que hizo Dulceida junto a otras influencers para promocionar su firma de ropa. Y los que no son fans, seguro que también tenían ganas de verlo después de toda la polémica que han generado las fotos de ese viaje. Si hasta Dulceida se ha marchado de Twitter sin decir ni adiós por el hartazgo de tantas críticas.

Se trata del primer viaje que la catalana hace con Dulceidashop, que como ella define, es "su bebé y máximo dolor de cabeza". Un sueño que tenía ganas de realizar desde hace tiempo, cuando veía cómo sus marcas americanas favoritas organizaban escapadas con amigas. Y Dulceida quiso hacer lo mismo y se llevó "a las niñas" que "más quiere": Laura Escanes, mujer de Risto Mejide, María Pombo, Madame de Rosa, Teresa Andrés Gonzalvo, Marta Lozano y Alba Paul, pareja de Dulceida.

Un vídeo de diez minutos nos desvela cómo fueron esos cuatro días en la isla balear. Comienza con un tour por la villa, de tres plantas, que parecía una leonera por el desorden y que se alquiló para su maravillosa estancia, con jardín y piscina infinity incluida.

Un cocinero se encargó de prepararles pasta a su llegada porque "la comida italiana es lo que le gusta a la mayoría", explica Dulceida. Seleccionados los modelitos, las chicas fueron a terminar la jornada en el Ushuaïa Ibiza Beach Hotel donde el DJ David Guetta (leído David, no Deivid) amenizó la fiesta de apertura de la temporada donde no faltaron el bailoteo y las risas.

Segundo día y el tiempo no es que les acompañe para su jornada en catamarán, pero las influencers estuvieron "a tope con el reguetón y paella". Fotos y más fotos fue el resumen de esa jornada.

A la mañana siguiente, Dulceida preparó varias sorpresas para sus amigas. La primera fue una sesión de entrenamiento con el personal trainner de la bloguera para así compensar los excesos. Ellas no se mostraron muy entusiasmadas con la idea, pero accedieron a ponerse a hacer deporte.

La segunda actividad fue una mezcla de diferentes juegos populares de la infancia, que todos recordamos como el pañuelo (más de una se da una leche) o la sillita, con pruebas de destreza. En una de ellas, se debían de tirar a la piscina, con los tobillos atados a una compañera, para llegar nadando a coger una botella de refresco y volver.

Sin embargo, los bañadores tan recortados que llevaban les jugaron malas pasadas y Dulceida mostró más de la cuenta. "Tengo todas las tetas fuera", grita (momento que en el vídeo aparece censurado con un emoji gigante de una flor).

Tanto ajetreo les provoca hambre y la anfitriona prepara una barbacoa en la villa donde les entrega regalos a sus amigas entre los que no falta el merchandising de su marca.

En la que será su última noche en la isla, celebran una fiesta donde Dulceida da un discurso de agradecimiento: "Gracias a todas por haber venido, sois las mejores y sois reales".