Este sábado, '40 de mayo', se ha cumplido el refrán de que hasta ese día no hay que quitarse la ropa de manga larga porque media España se encuentra con temperaturas entre cinco y 10 grados menos de lo normal para esta época del año.

De hecho, la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) indica que los termómetros marcarán menos de 25ºC en toda España salvo las provincias mediterráneas y algunos lugares próximos, e incluso no superarán los 15ºC en puntos del oeste de Castilla y León y de Galicia, que son valores más propios del inicio de la primavera que de la cercanía del verano.

Las capitales más calurosas serán Zaragoza (32ºC); Murcia (30); Girona, Lleida y Palma de Mallorca (29), y Córdoba, mientras que las temperaturas máximas serán más frescas en Ávila (16), Lugo y Segovia (17), y Cuenca, Palencia, Salamanca, Valladolid y Zamora (18).

La portavoz de la Aemet, Ana Casals, ha señalado a Servimedia que este sábado habrá temperaturas "bastante más bajas de lo habitual para la época del año" en amplias zonas del interior de la mitad oeste peninsular, donde los termómetros marcarán entre cinco y 10 grados menos de lo habitual (sobre todo en el sur de Galicia, Castilla y León, Comunidad de Madrid, sur y este de Castilla-La Mancha, Extremadura y el oeste de Andalucía).

Las temperaturas de este sábado bajarán en Canarias, la Meseta Norte, el Cantábrico oriental, el alto Ebro y el interior del sureste peninsular, mientras que subirán en el noreste de la península y en Baleares, y en el resto del país apenas cambiarán.

Por otro lado, este '40 de mayo' no saldrá el sol en muchas zonas de España debido a la influencia de una depresión aislada en niveles altos (Dana, en términos meteorológicos). En el noroeste peninsular, el este del País Vasco, Navarra, Aragón y el sur del Sistema Ibérico se producirán precipitaciones acompañadas de tormentas ocasionales que pueden ser localmente fuertes y rachas intensas de viento.

Este sábado podría granizar en el sur de Aragón y zonas próximas, y se espera alguna lluvia débil, dispersa y ocasional en las islas de mayor relieve de Canarias y buena parte del resto de la península, aunque son poco probables en el área mediterránea.