La vida amorosa del Rey Felipe VI ha estado marcada por la incertidumbre de quién se convertiría en la mujer que le acompañaría en el trono y sería coronada como reina de España.

Mucho antes del esperado enlace el 22 de mayo de 2004 con Letizia Ortiz, quien por entonces era presentadora de los informativos de TVE, por el corazón de Felipe pasaron otras mujeres.

La primera novia conocida del monarca también fue una periodista. Victoria Carvajal y Hoyos, perteneciente a la alta sociedad madrileña e hija de los marqueses de Isasi, conoció a Felipe en el colegio Santa María de los Rosales y ambos compartían vacaciones en Mallorca. Vicky ocupó el corazón de un jovencísimo Felipe (17), aunque su historia acabó siendo un amor adolescente que no prosperó.

Unos años más tarde Isabel Sartorius llegó a la vida del por entonces príncipe de Asturias. Hija de Vicente Sartorius, marqués de Mariño, y de la argentina Isabel Zorraquín, Isabel se ceñía a las ya más que conocidas preferencias del futuro monarca: rubia, alta y de ojos azules. Felipe (24), tres años menor que ella, se había enamorado. Tras un noviazgo de cuatro años, la relación se rompió cuando el príncipe se marchó a EEUU para continuar con sus estudios.

Cruzado el charco, los ojos de Felipe se posaron en Giselle Gigi Howard, una modelo de ojos azules con la que mantuvo un romance de unos meses y que acabó en el verano de 1995.

De regreso a España para finalizar sus estudios, se le relacionó con la hija del embajador español en Alemania: Gabriela Sebastián de Erice.

La lista con las posibles acompañantes de Felipe siguió alargándose hasta que llegó la mujer de la que España llegó a pensar que se convertiría en princesa.

El heredero noruego Haakon Magnus fue el cupido del romance más conocido del monarca cuando le presentó Eva Sannum en Oslo en 1997. La modelo noruega, rubia, de ojos azules y piel clara, aspiraba convertirse en miembro de la realeza, algo que finalmente no sucedió. La pareja hizo oficial su relación en 2001 acudiendo conjuntamente a la boda del príncipe Haakon y la princesa Mette-Marit. Un acto en el que Sannum lució un escotado vestido azul de satén, un episodio que fue muy comentado en España.

Ese mismo año Felipe VI se vio obligado a escoger entre el amor o cumplir con su obligación como futuro rey, decantándose por hacer oficial la ruptura en una rueda de prensa. "Su fortaleza, dignidad, sensibilidad, capacidad de superación y determinación por llegar a la excelencia siempre me han impresionado. Y no sigo, porque no acabaría nunca", se emocionaba un Felipe con el corazón roto.

El listado de mujeres con las que se relacionó al monarca durante muchos años es extenso, con nombres como Inés Sastre, Tatiana de Liechtestein, las modelos Yasmeen Ghauri o Alicia Krezjlova, la actriz Gwyneth Paltrow, Gabriela Sebastián de Erice, la mexicana Marcela Cuevas o Carolina de Waldburg.

Hasta que llegó la definitiva. Letizia Ortiz Rocasolano (Oviedo, 1972), de padre reportero y madre enfermera, era periodista y presentaba los informativos de TVE cuando el monarca se interesó por ella en el año 2002. Su ascenso al trono era dudoso por su origen plebeyo y estar divorciada, además de mostrar un carácter fuerte.

Sin embargo, el 1 de noviembre de 2003 Felipe hizo oficial su compromiso con la periodista asturiana y los españoles conocimos al fin a la mujer escogida para reinar España al lado de Felipe de Borbón, la primera heredera al trono que no pertenecía a la monarquía. Casi 14 años después del enlace y con dos hijas por el camino (las infantas Leonor y Sofía), los actuales reyes de España celebran este martes juntos el 50º cumpleaños de Felipe de Borbón.