Casi 40 familias viven en chabolas en cuatro zonas de la ciudad

Viven desde hace tiempo en Ranillas, Cogullada, el recinto ferial y el callejón Ariño. Muchas no disponen de luz ni de agua.
En una de las chabolas que hay en las inmediaciones de Mercazaragoza. (F. S:)
En una de las chabolas que hay en las inmediaciones de Mercazaragoza. (F. S:)
En una de las chabolas que hay en las inmediaciones de Mercazaragoza. (F. S:)
El chabolismo persiste todavía en cuatro zonas de Zaragoza. En los últimos años se han creado nuevos núcleos de marginación en la zona del ferial, en torno a Mercazaragoza, en el callejón Ariño y en Ranillas.

Entre chabolas y caravanas improvisadas viven más de 35 familias que están excluidas de la sociedad y que en pocos meses podrían reubicarse en casas. Diversas entidades, tanto públicas como privadas, están tratando de realojarlas en viviendas dignas a través del Plan de Erradicación del Chabolismo, que se puso en marcha en marzo de 2003.

El problema más grave de chabolismo se encuentra en la zona de Cogullada, cerca de Mercazaragoza, donde viven ocho familias sin luz ni agua. Llegaron allí hace un año cuando los desalojaron  del barrio de La Jota y su integración es la más difícil, dado que siempre han vivido de esta forma.

En la zona del ferial, entre el camino del Ferrocarril y el de Cascajares, una veintena de familias viven en caravanas. Disponen de tendido eléctrico y agua potable y ocupan dos parcelas particulares, aunque los propietarios nunca los han denunciado.

Zonas ‘okupadas’

Un caso más peculiar es el del callejón Ariño, donde ocho familias viven de okupas. Residen desde hace más de un año en viviendas que pertenecen a inmobiliarias, que estudian desde hace tiempo la manera de echarlos.

La zona de Ranillas acumula desde hace dos años a multitud de familias que, aunque tienen casa en la ciudad, viven de forma habitual en esta zona, entre chabolas. «En Zaragoza no hay un problema grave de chabolismo, pero sí de una realidad clara de marginación que es necesario tener controlada», explica Miguel Ángel Morell, responsable del Plan de Erradicación del Chabolismo, apoyado por la DGA, el Ayuntamiento, Cáritas y Asociación de Promoción Gitana.
Un proyecto con éxito

Desde comienzos de 2003, el Plan de Erradicación del Chabolismo trabaja para terminar con los focos de marginación de la capital aragonesa. Ya lo ha conseguido con los enclaves del Camino del Pilón, río Gállego y la zona del Príncipe Felipe. De las 40 familias que se encontraban en situación de chabolismo en 2003, 37 ya han sido realojadas en casas (con datos a fecha del 12 de julio). De ellas, seis viven en casa propia, cinco en régimen de alquiler, cuatro con familiares y 22 en viviendas de protección.
Mostrar comentarios

Códigos Descuento