Alejandro tiene 15 años y es vecino del Pau de Carabanchel. Padece desde su nacimiento una enfermedad de las llamadas 'raras' (distrofia facioescapohumera). Esta dolencia degenerativa ha ido mermando su capacidad muscular hasta que hace año y medio le ha obligado a desplazarse en una silla de ruedas. Pese a todo, su vida es muy parecida a la de cualquier adolescente de su edad: va al instituto, sale a divertirse con sus amigos, le gusta el deporte...

Su problema llega cuando intenta salir de Carabanchel en metro con sus amigos. La parada de su barrio es La Peseta (línea 11), estación que solo ofrece la posibilidad de ir a Plaza Elíptica (línea 11 y 6) para enlazar con otras líneas del suburbano. A partir de allí no existe combinación adaptada para coger la circular (línea 6): hay ascensor sí, pero de forma parcial porque no llega hasta el andén, por lo que Alejandro queda atrapado en Plaza Elíptica ante la imposibilidad de bajar hasta la línea circular por otros medios.

Este problema de accesibilidad afecta al 30% (90) de las estaciones de Metro. En concreto, de las 301 paradas del suburbano, sólo 211 están dotadas de un ascensor que permita la accesibilidad completa a personas con movilidad reducida, según los datos aportados por Metro. "Somos conscientes de la situación de Plaza Elíptica, y, aunque aún no hay fecha concreta para iniciar los trámites para instalar un ascensor, es algo que queremos solucionar cuanto antes", explican desde el suburbano, que adelanta que "en los próximos meses se instalará un nuevo ascensor en la estación de Sol" que hará que todos los andenes de la estación (lo eran todos excepto uno de la línea 1) sean accesibles en ascensor.

"Intento hacer mi vida con la mayor normalidad posible y luchar cada día por no perderme detalle de lo que sucede a mi alrededor", asegura a 20minutos Alejandro, que es de lo más gráfico a la hora de calificar esta situación: "Es una putada muy gorda". A su lado, su madre, Mercedes Alonso, se pregunta si "¿tratándose de un barrio joven y después de las obras que tuvieron que efectuar para crear esta estación no podían haber pensado un poco más en estas personas?". "En unos años, tendrá que trasladarse a la Universidad para poder seguir con sus estudios y veo imposible que pueda hacerlo de forma autónoma", añade Merecedes, que denunció la situación ante Metro el pasado verano. "Entre nuestras prioridades está ir aumentando la dotación de este tipo de instalaciones, en donde tienen prioridad las estaciones más demandadas y las que tienen correspondencia con varias líneas, aunque a veces existen limitaciones técnicas por las características arquitectónicas de algunas estaciones, o por su antigüedad", le contestaron. En la Comunidad de Madrid hay 185.560 personas que sufren una discapacidad física, según los últimos datos facilitados por la Consejería de Asuntos Sociales.

Desde la Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de la Comunidad de Madrid (FAMMA) opinan que esta situación que afecta miles de personas "es una vergüenza" y que en este caso se está incumpliendo la ley. "La ley dice que cuando coincidan dos líneas la estación tiene que ser completamente accesible", afirma Javier Font, su presidente. Font denuncia la falta de transparencia y de inversión que ha habido en estos ultimos años en materia de accesibilidad en Metro: "No sabemos la partida concreta se ha destinado a mejorar el metro porque no lo especifican en el presupuesto, aunque está claro que no ha sido una cantidad importante porque elementos clave para la accesibilidad como el ascensor y las escaleras mecánicas sufren averías continuamente".

Entre 2010 y 2014, la Comunidad de Madrid ha reducido un 67,74% el presupuesto para accesibilidad y la supresión de barreras arquitectónicas, según los datos que el Consejo para la Promoción y Supresión de las Barreras Arquitectónicas ha facilitado a FAMMA. En 2010, el Gobierno regional destinó 87.312.527 euros a la eliminación de barreras arquitectónicas, mientras que en 2014 el presupuesto se situó en 28.163.645 euros. De 2015 aún no se han hecho públicos los datos.

La accesibilidad universal en el transporte y todos los edificios de uso público en los que sea viable debería ser una realidad el 4 de diciembre de 2017, según figura en el Real Decreto 1/2013 por el que se aprueba el Texto Refundido de la Ley General de derechos de las personas con discapacidad. "No contamos con ello. Pero esta situación no la vamos a consentir. Estamos esperando a que llegue la fecha para empezar a emprender acciones legales ante las administraciones o entidades que estén incumpliendo la ley. Nuestro deber es defender los derechos del colectivo y tenemos la justicia de nuestro lado", manifiesta Font.