Con la disolución del Consejo, Abás ha destituido formalmente el último resquicio de coparticipación con Hamás en las instituciones de poder, pues el depuesto primer ministro y líder del grupo islámico, Ismail Haniye, era el vicepresidente de dicho organismo.

Reunión del Gobierno de emergencia

Entretanto, el flamante Ejecutivo de emergencia, encabezado por Salam Fayad, ha celebrado su primera reunión en la que se analizó la delicada situación de seguridad en la franja de Gaza y las vías para que la población palestina pueda regresar a la normalidad lo antes posible.

Fayad, primer ministro, recibirá esta tarde en las oficinas del gobierno al Cónsul general de EEUU en Jerusalén, Jacob Walles.

Se espera que ambos dialoguen acerca de las medidas para reforzar al Ejecutivo palestino designado por Abás, así como la reanudación de las ayudas económicas por parte de la comunidad internacional a este gobierno que no está integrado por ningún miembro de Hamás.

Promesas, pero sin ayuda

El ministro de Información y Justicia, Riad al Maliki, declaró a los medios que, pese a las promesas de Israel y EEUU de que reanudarán las ayudas económicas al gobierno de emergencia, "hasta el momento no hemos recibido nada"; a estas ayudas hay que sumar las de la Unión Europea, que ha anunciado que va a reanudar el envío de ayuda económica a ANP .

"Debemos trabajar día y noche porque la situación apremia y no tenemos tiempo que perder, tenemos que esforzarnos para ayudar al pueblo palestino", agregó Al Maliki.

Hamás, por su parte, exhortó a los países árabes y a la comunidad internacional a a que no mantengan vínculos con el gobierno de Fayad al que consideró "ilegítimo", calificando cualquier contacto como una "intervención flagrante en los asuntos internos palestinos".

Sami abú Zuhri, portavoz de Hamás en la franja de Gaza, destacó el hecho de que sólo EEUU e Israel se han apresurado a dar la bienvenida al nuevo e "ilegal" gobierno de Fayad.

Carta desde la cárcel

El carismático dirigente de Al Fatah en Cisjordania Maruán Barguti, encarcelado desde 2002 en Israel y condenado por asesinato , pidió hoy a las milicias de su movimiento y de Hamás que cesen los actos de violencia.

"Considerad al golpe militar de Hamás en Gaza como una amenaza peligrosa a la unidad y la causa palestina, un cambio en la opción de la resistencia y la destrucción de los principios de coalición", asegura en uno de los siete puntos que posee la carta.

Sin embargo, Barguti también llamó a los miembros de Al Fatah a que renunciaran a tomar de forma violenta las instituciones regentadas por Hamás o en las que figuran miembros del grupo islámico en Cisjordania e instó a Abás a cesar a todos los dirigentes de los organismos de seguridad y nombrar a líderes capaces de reformar y desarrollar las instituciones de seguridad basados en el profesionalismo.