Dos semanas del terremoto de Nepal: faltan ayudas y comienza la amenaza de epidemias

  • Desde la OMS alertan de posibles brotes de cólera, sarampión y rubeola.
  • "Hemos pasado ya la primera fase, con prioridades muy distintas de lo que son hoy; nos tenemos que preparar más es para las enfermedades", aseguran.
  • La ONU y el PMA han afirmado que no están recibiendo los fondos que necesitan para ayudar a los damnificados.
  • Casi un millón de niños se han quedado sin escuelas y la mayoría de hospitales han quedado inservibles.
Nepalíes hacen cola para recoger alimentos en un campo de refugiados de Katmandú.
Nepalíes hacen cola para recoger alimentos en un campo de refugiados de Katmandú.
EFE
Nepalíes hacen cola para recoger alimentos en un campo de refugiados de Katmandú.

Nepal afronta desafíos en materia sanitaria y educativa tras el terremoto del pasado día 25, una catástrofe que ha dejado miles de muertos y algunos pilares sociales necesitados de soluciones a medio y largo plazo. La

La directora regional para el Sur y el Este de Asia de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Poonam Khetrapal Singh, indicaba esta semana que el organismo vigila posibles brotes de enfermedades como el cólera, el sarampión y la rubeola, pero aseguró que hay medios para hacerles frente.

"Está llegando el periodo en el que tenemos que estar vigilantes", declaró, al repasar la situación en el país tras un terremoto que en su opinión deja lecciones en materia de construcción de hospitales y la necesidad de seguir los protocolos en países vulnerables a los desastres.

"Hemos pasado ya la primera fase, en la que nuestras prioridades eran muy distintas de lo que son hoy; en la primera fase estábamos en la atención de gente herida y hoy sabemos que para lo que nos tenemos que preparar más es para las enfermedades", señaló. La doctora india destacó que se han detectado casos de diarrea y de cólera, y recordó que esta última enfermedad es endémica en Nepal.

"Tenemos las vacunas en Nepal y son fácilmente disponibles con la Cruz Roja, estamos preparados para esta eventualidad", subrayó, para agregar que el objetivo es "evitar una epidemia". "Se ha hablado de sarampión y rubeola, estamos dando inmunización para ambas enfermedades en los campos en los que está la gente", manifestó sobre la cobertura en los campamentos de desplazados que hay en Katmandú y en otras partes del país asiático.

Sin escuelas ni hospitales

La directora regional de la OMS llamó la atención sobre la necesidad de seguir las normas de seguridad en la construcción de instalaciones sanitarias. Los hospitales de la capital, que habían seguido más o menos las normas, aguantaron, pero en los distritos afectados quedaron inservibles, afirmó.

No sólo los problemas están en el terreno de la salud. En el apartado educativo Unicef alertó esta semana sobre el riesgo de que casi un millón de niños no pueda incorporarse a las clases si no se crean aulas temporales y se reparan las escuelas dañadas.

Unas 24.000 aulas resultaron dañadas en el seísmo, lo que pone en peligro el regreso a los colegios de los escolares el 15 de mayo, fecha en que está prevista la reanudación de las clases detenidas tras la tragedia, explicó UNICEF en un comunicado. "Casi un millón de niños que estaban matriculados en el colegio antes del terremoto podrían encontrarse ahora con que no tienen una escuela a la que volver", dijo Tomoo Hozumi, su representante en Nepal.

Faltan ayudas

La ONU afirmó este viernes que no está recibiendo los fondos que necesita para ayudar a los damnificados por el devastador terremoto que golpeó Nepal el pasado 25 de abril, mientras el Gobierno nepalí se comprometió a reconstruir en dos años los miles de edificios destruidos por el seísmo.

El principal responsable de la ONU y de la operación humanitaria en Nepal, Jamie McGoldrick, declaró este viernes en una rueda de prensa en el país asiático que su organización sólo ha recibido 22 de los 415 millones de dólares que pidió para financiar en los próximos tres meses la ayuda más urgente para los afectados.

"Necesitamos urgentemente fondos para continuar el trabajo", indicó McGoldrick, quien añadió que es "necesario elevar esto dramáticamente", en relación a la cantidad de fondos que se han recaudado hasta ahora.

"Nuestro principal objetivo ahora es alcanzar las áreas afectadas en zonas remotas, áreas de difícil acceso, lo más rápido posible, antes de que llegue el monzón", afirmó McGoldrick, quien añadió que es necesario que los afectados tengan "un techo sobre sus cabezas" cuando comiencen las lluvias, que se esperan a partir de junio.

El ministro nepalí de Transportes, Devendra Karki, aseguró que excepto la carretera Araniko que lleva hasta la frontera con China, están abiertas al tráfico el resto de vías de comunicación terrestre en los doce distritos más afectados por el seísmo, según informaron medios locales.

El Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas (PMA) advirtió este viernes en un comunicado de que también está "teniendo dificultades para conseguir financiación" para distribuir comida entre los afectados.

"La asistencia alimentaria es una necesidad cada vez más urgente debido a los graves desafíos logísticos que supone llegar a cientos de miles de supervivientes en algunos de los puntos más afectados y en las áreas más remotas de Nepal", alertó el organismo en la nota. "La población nepalí es resistente, pero no podemos esperar que familias enteras vivan en las ruinas de sus casas, con escasa comida y sin un techo, cuando se acerca la época de los monzones", según Richard Ragan, quien coordina la operación del PMA.

Mientras Naciones Unidas lamentaba la lenta recaudación de fondos para ayudar a los afectados por el seísmo, el primer ministro de Nepal, Sushil Koirala, se comprometió a reconstruir los edificios afectados por el terremoto en dos años y los monumentos en cinco.

Los últimos datos del Ejecutivo del país asiático calculan cerca de 290.800 construcciones privadas totalmente destruidas y más de 251.800 parcialmente, tras el seísmo. "Con cooperación y apoyo desde todos los rincones, puedo decir que ningún nepalí en la zona afectada por el terremoto permanecerá sin casa ni escaso de comida", dijo Koirala durante una reunión en la Asamblea Constituyente, que sirve como Parlamento del país.

El Gobierno ha pedido la donación de 2.000 millones de dólares para la reconstrucción en Nepal, uno de los países más pobres del mundo que obtiene gran parte de sus ingresos gracias a las expediciones al Himalaya y al turismo cultural atraído por la riqueza monumental del Valle de Katmandú. Este área con siete conjuntos de monumentos y edificios representativos y otra zona destacada como herencia natural por la Unesco, el Parque Nacional de Sagarmantha, que incluye al monte Everest, se han visto gravemente afectados por el seísmo.

Incluso parlamentarios del Congreso Nepalí (NC, en inglés), uno de los partidos que sustentan el Gobierno, han cuestionado la capacidad de este para afrontar la crisis humanitaria. "No puede dar ni una botella de agua y una tienda de campaña" a los afectados, criticó el parlamentario Mahendra Yadav, según recoge el diario local Kantipur. "Las tiendas de campaña, que podrían haber traído en un día, no han llegado a las víctimas catorce días después del terremoto", lamentó otro representante de esta formación, Aang Tawa Sherpa.

Este ha sido el terremoto de mayor magnitud en Nepal en 80 años y el peor en la región del Himalaya en una década, desde que en 2005 otro seísmo ocasionara más de 84.000 muertos en Cachemira.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento