Ashya King, el niño británico afectado por un tumor cerebral, podrá ser sometido a terapia de protones al no haberse detectado metástasis en la espina dorsal, anunció el Proton Therapy Center de Praga, donde el pequeño va a ser tratado. "Mañana informaremos de cuándo comienza el tratamiento", confirmó Jana Kulhankova, portavoz del centro, cuyos especialistas examinaron el pasado martes al niño de cinco años.

El sofisticado tratamiento con protones estaba condicionado a que no se detectara metástasis en la espina dorsal de Ashya.

Está previsto que el niño, que tiene un meduloblastoma, reciba treinta sesiones de radioterapia con protones en el PTC y, simultáneamente, quimioterapia de acompañamiento en el hospital infantil de Motol. El avanzado procedimiento de terapia con protones, que incluye la hospitalización durante seis semanas, cuesta hasta 82.000 euros.

Los padres del menor lo sacaron a finales de agosto sin permiso médico del hospital británico en el que estaba siendo tratado y lo llevaron a Málaga, para obtener dinero a través de la venta de algunas propiedades y poder así financiar un tratamiento de este tipo para su hijo.