El informe PISA consolida la brecha educativa en España en función de la renta y el territorio

Un aula de Instituto de Educación Secundaria.
Un aula de Instituto de Educación Secundaria.
EFE
Un aula de Instituto de Educación Secundaria.

El informe PISA sirve desde hace 13 años para buscar el lugar en el mundo que ocupa la educación española, pero en su último informe, presentado este martes, el foco alumbra sobre todo a la gran diferencia de nivel entre alumnos según su Comunidad Autónoma y la renta familiar.  El informe expone que un alumno de 15 años de Navarra demuestra conocimientos y destrezas en matemáticas, lectura y ciencias superior en un curso escolar al nivel de otro quinceañero residente en Murcia o en Extremadura.

A nivel nacional, como país, el rendimiento de los alumnos españoles de 15 años se mantiene estable en las tres materias, con alguna mejoría leve, pero internamente aumenta la desigualdad de resultados entre los estudiantes de mayor y menor renta, lo que significa una pérdida de equidad.

Las pruebas han sido realizadas a 25.313 alumnos y se han fijado en las matemáticas como temática principal. En dicha asignatura otorgan una puntuación a España de 484 puntos, un punto por debajo de la nota recibida de 2003. La puntuación es significativamente inferior a la media de la OCDE (494) y sigue alejada del país mejor posicionado a nivel mundial, Corea del Sur con 554 puntos.

Navarra, al nivel de Finlandia

Dentro de España el informe ha examinado las competencias educativas de 14 Comunidades Autónomas. El ranking resultante segrega a los alumnos del sur de los del norte. Navarra,  Castilla y León, Madrid, País Vasco y La Rioja son las Comunidades Autónomas que obtienen mejores resultados (por encima de las puntuaciones de España y de la OCDE). Murcia y Extremadura se sitúan a la cola, hasta 30 puntos por debajo de la OCDE.

El informe PISA equipara los conocimientos y destrezas del adolescente en Navarra al de la ejemplar Finlandia, mientras el de Extremadura se sitúa en paralelo al de la vapuleada Grecia. La diferencia de puntuación entre alumnos navarros (517) y extremeños (461) en matemáticas resulta equivalente a "un curso escolar completo más un trimestre", según cálculos de la OCDE.

Entre los factores asociados al rendimiento educativo, el informe PISA atribuye a España un excesivo peso de la situación socioconómica de los alumnos. Es la revelación más importante del informe, a juicio del catedrático de la Universidad Pompeu Fabra José García Montalvo. "Las comunidades autónomas más ricas puntúan mucho mejor. La situación socioeconómica y cultural es capaz de explicar por sí sola la diferencia de conocimientos y destrezas", destaca.

El sociólogo Julio Carabaña encuentra la explicación al peso del factor socioeconómico en que el informe "mide competencias que cada vez aportan menos información sobre el sistema educativo y más sobre la condiciones de desarrollo mental en general de los jóvenes, que dependen solo parcialmente de la escuela".

Retroceso de la equidad educativa

En la presentación de los resultados del informe, la secretaria de Estado de Educación, Montserrat Gomendio, además del estancamiento del rendimiento pese a la inversión por alumno en los últimos diez años, destacó la aparición de la inequidad en España. En 2012 los alumnos de nivel socioeconómico favorecido obtuvieron 34 puntos más en matemáticas, una brecha seis puntos por encima de la detectada en 2003. Gomendio defendió como "necesario" el cambio de modelo educativo "que establece la Lomce", recién aprobada solo con los votos del PP y fuertemente contestada por "ideológica" por la oposición, los profesores y los padres.

El analista principal de PISA en España, Pablo Zoido, advirtió en la presentación de que los sistemas educativos con mejores resultados destacaban por una distribución de los recursos "equitativa". Zoido, sin embargo, consideró que es demasiado pronto para relacionar el impacto de la crisis, o de los "recortes", con los resultados.

Históricamente se ha venido utilizando este informe para analizar los modelos educativos de éxito, poniendo la mirada en lo alto de la tabla —Corea, Japón y Suiza—. García Montalbo encuentra tres líneas de actuación en las que destacan los países que mejor puntúan: "Mayor autonomía de los centros educativos (desde el punto de vista curricular y administrativo), calidad del profesorado, y la implantación de pruebas de nivel sin llegar a la obsesión por los resultados".

El informe PISA 2012 obliga a revisar la inequidad, así como a fijarse en políticas educativas de las Comunidades Autónomas del norte de España, tal y como reconocía la propia secretaria de Estado de Educación. Concretamente, Navarra, Castilla y León o País Vasco, cuyos alumnos han destacado por encima de lo esperable en los test de matemáticas, lectura y ciencias.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento