Los problemas se acumulan en torno al proyecto de Eurovegas en Madrid y cada vez se levantan más voces que ponen en entredicho su futuro. Por un lado, el Gobierno central no acaba de acometer la reforma en la Ley Antitabaco para permitir fumar en los casinos (aunque busca "fórmulas" para hacerlo), una de las condiciones impuestas por el magnate Sheldon Adelson. El presidente regional, Ignacio González, admitió este martes por primera vez que el proyecto peligra por esta razon. Y en mitad del debate sobre el tabaco, el sector financiero y el propio Gobierno de Rajoy dudan de que la compañía Las Vegas Sands (LVS) consiga el dinero necesario para levantar su complejo de ocio.

La multinacional promotora de Eurovegas ya avisó en junio de 2012 que necesitaría pedir dinero prestado a los bancos para realizar su proyecto: un 35% de la inversión necesaria saldría del capital propio de Las Vegas Sands, pero el 65% restante vendría de financiación externa. Para la primera fase se necesitarían 7.600 millones de euros, de los cuales solo 2.686 serían aportados por Adelson. En un momento de crisis bancaria como el actual, esta necesidad de dinero se vio como un escollo para el proyecto. Ahora, varias entidades del sector financiero expresan sus dudas sobre la viabilidad del complejo.

"Desde nuestro punto de vista, [el proyecto de Las Vegas en] España sigue siendo poco probable", asegura Deutsche Bank en un análisis sobre los planes internacionales de LVS. En opinión de sus analistas, "el proyecto en España está potencialmente en las últimas". También el banco de inversión JPMorgan considera que el complejo "puede ser archivado" y añade: "Es difícil que logren más concesiones de Madrid, provocando que LVS reforme sus previsiones", según un informe que adelantó Cinco Días.

Los expertos en el sector inmobiliario también sospechan que el retraso de Eurovegas tiene otros motivos, más allá del asunto del tabaco. "Parece que algo no funciona, según todos los análisis. Es posible incluso que el argumento de la Ley Antitabaco sea una excusa de la Comunidad de Madrid para descargarse de culpas y cargársela al Gobierno en caso de que finalmente Adelson se vaya", explica José Luis Ruiz, consultor inmobiliario. "Al final lo importante es que el proyecto convenza al que tiene que dar dinero a Adelson para financiar el proyecto. Y en este caso parece haber dudas de que esa inversión tenga un retorno o sea rentable", añade Ruiz.

Incluso, el Gobierno central se ha sumado a las voces que cuestionan la operación desde el punto de vista económico. El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ha asegurado que el proyecto depende de "la financiación disponible por parte del promotor". Tras estas declaraciones, fuentes de la Comunidad han acusado este miércoles al Gobierno de "tratar de eclipsar el verdadero asunto, que es la falta de un marco legal por parte del Gobierno que ofrezca seguridad jurídica a la compañía".

En cualquier caso, LVS nunca ha ocultado que la realización de su proyecto está sujeto a condicionantes. Sin ir más lejos, cuando la empresa entregó el estudio de viabilidad de Eurovegas en julio, los representantes de Adelson aclararon que el informe "no es vinculante" y que "aún no es firme". A continuación añadieron que el proyecto será realidad "si se dan las condiciones adecuadas para la inversión". De todos modos, LVS no hace declaraciones sobre su búsqueda de financiación y se limita a asegurar que "nada ha cambiado desde que se presentó el proyecto de viabilidad".