El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha señalado este sábado que "dividir, separar y restar" solamente llevará a la "inacción y la irrelevancia" de aquellas regiones que opten por la "secesión", al tiempo que también "debilitará a España".
Así se ha pronunciado el jefe de la diplomacia española durante su intervención en Melilla, donde ha recibido el título de Hijo Adoptivo, en reconocimiento a la labor que desempeñó en sus inicios como político en 1977, cuando fue designado como diputado por la ciudad en las Cortes Constituyentes.
García-Margallo ha dicho que la única autonomía que entiende es la de la integración competitiva para hacer más grande España, para que pueda tener más importancia en el seno de la Unión Europea y en un mundo globalizado.
"La secesión de cualquier región de España no es solo dolorosísima desde el punto de vista intelectual, sino que es una amputación dolorosísima desde el punto de vista personal", ha manifestado.
Su objetivo es defender a España
El ministro ha asegurado que cualquier división impediría realizar la misión que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, le ha encargado, que es la defensa de España en el exterior.
En opinión de García-Margallo, la única política exterior para una nación tan antigua como España es la de hablar como un país grande, actuar como un país grande y ser un país grande y una gran nación.
"Ese es el objetivo de este Gobierno y ese es el objetivo que yo me he propuesto", ha manifestado.
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