El embajador de Israel en España, Alon Bar, ha pedido este miércoles a España y a los países de la Unión Europea que dejen de importar petróleo de Irán como medida con el fin de presionar al régimen Mahmud Ahmadineyad para que detenga su programa nuclear.

Bar, en un desayuno organizado por el Club Internacional de Prensa en Madrid, ha reconocido que el embargo del petróleo iraní es una decisión difícil para España, al ser su principal suministrador, pero ha advertido de que los efectos serán peores a largo plazo si no se logra detener con sanciones el proyecto nuclear de Teherán.

El 14% del crudo importado por España en 2010 procedió de Irán, según datos de la Comisión Nacional de la Energía (CNE). En el conjunto de la UE, las importaciones petroleras de Irán suponen alrededor del 5,7%.

Los países europeos acordaron el pasado 1 de diciembre aumentar su presión sobre el régimen iraní, pero sin llegar a aprobar el embargo de crudo ante las reticencias de algunos socios por el posible impacto económico de esta medida.

El embajador israelí ha recomendado a España y a la UE que aunque se vean afectados sus intereses a "corto y medio plazo", apliquen ya medidas "insoportables" para el Gobierno de Teherán.

Además del embargo de petróleo, Bar ha considerado necesario que la UE lleve a la práctica acciones similares a las aplicadas contra Siria. Entre ellas, ha citado la restricción de las conexiones aéreas y marítimas con Irán y la imposición de sanciones al Banco Central de este país.

A su juicio, "el tiempo para poder parar este programa (nuclear) es corto". "Si sigue adelante, no habrá calma, sino más tensión. Para evitar el enfrentamiento armado, hay que tomar decisiones duras", ha añadido el diplomático israelí.

La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), por otro lado, ha decidido en Viena mantener su nivel de producción petrolera en 30 millones de barriles diarios (mbd), confirmó el ministro venezolano de Petróleo, Rafael Ramírez.

"Tenemos un acuerdo para mantener el mercado en equilibrio y vamos a reajustar el nivel de producción de cada país con el fin de abrir espacio para la producción libia", añadió el ministro en declaraciones a prensa en la capital austríaca, donde los ministros de Petróleo de los 12 países miembros de la OPEP se reunieron para analizar la situación en el mercado petrolero.

"El que está sobreproduciendo tiene que reducir", en alusión a los socios de la organización que han abierto los grifos para compensar el corte de las exportaciones de crudo libio durante la guerra civil del país, principalmente Arabia Saudí.