Tranvía de Parla S.A., empresa concesionaria del tranvía del municipio, dejó de prestar el servicio este jueves debido a las deudas que el Ayuntamiento, gobernado por el PSOe, acumula con la entidad y con Alstom, la empresa encargada del mantenimiento. Haber puesto los trenes en marcha, según la compañía, habría supuesto poner en peligro a los usuarios.

La decisión de Tranvía de Parla S.A. la comunicó el propio Ayuntamiento a última hora de este miércoles, después de resultar infructuosas las negociaciones entre las partes.

El miércoles, como medida de presión, sólo habían salido a circular dos de los nueve trenes (uno por cada vía, con una frecuencia de paso de unos 25 ó 30 minutos, cuando lo habitual es que pasen cada siete minutos y medio), ya que Alstom ha decidido dejar de prestar el servicio de mantenimiento debido al impago de 6,5 millones de euros que arrastran desde el año 2009 por parte de la empresa Tranvía de Parla S.A.

Desde el Ayuntamiento parleño aseguran que ellos han cumplido el calendario de pagos con la empresa adjudicataria, por lo que no entienden por qué ésta no paga a Alstom, y han garantizado la prestación del servicio. Sin embargo, desde Tranvía S.A. han replicado que no van a pronunciarse "respecto a las versiones del Ayuntamiento, pero por todos es sabido desde hace mucho tiempo la deuda que tienen con el tranvía", sin querer entrar en cifras, que desde el PP parleño se estiman en 48 millones de euros.

Por su parte, desde la empresa encargada del mantenimiento, Alstom, un representante de la compañía ha declaradoque "ya va camino de tres años sin que cobremos una sola factura. Dimos un ultimátum a Tranvía de Parla hace tres semanas y no hemos recibido ninguna solución. Creo que ya hemos aguantado bastante".

Desde Alstom han precisado que, "por contrato, a los tres meses de una factura impagada se puede pedir la rescisión del contrato. Dentro de poco hará tres años del primer impago, a principios de 2009, y no hemos enviado esta carta exigiendo el pago hasta el pasado 3 de noviembre".

Por último, ha recalcado que "somos conscientes de la necesidad del servicio y estamos deseosos de que nos ofrezcan una solución para volver a trabajar. Pero, como cualquier empresa, debemos cobrar por nuestro servicio".