Les gusta bucear entre un mar de prefijos y dicciones sonoras para dotar a sus discos de títulos de ciencia ficción. Tras publicar dos EP (Cientocero y otro homónimo) y el álbum de larga duración Electroviral, Supersubmarina vuelve con Realimentación, otro ejemplo de pop cantado en castellano con regusto épico que representa "la necesidad de retroalimentarse después de más de 200 conciertos por toda España". Hablamos con Juan Carlos, batería de la banda.

Este disco tiene únicamente cuatro cortes. ¿Es mejor la música en pequeñas dosis, por aquello de las malas digestiones?

Habíamos publicado un larga duración solo un año antes, y pensamos que un EP estaría bien para no dejar pasar más tiempo hasta el próximo trabajo. Hay mucha gente que sigue ya al grupo y es bueno mantenerles pendientes.

Algunos les han equiparado a Vetusta Morla. ¿Las comparaciones son odiosas?

Vetusta Morla hacen su trabajo muy bien, gustan a mucha gente y cuando alguien triunfa, el resto queda detrás. Pero no nos calentamos mucho la cabeza con eso. Hicimos unas referencias en Twitter a una noticia de Rolling Stone que nos incluía en un reportaje titulado Grupos que quieren ser Vetusta Morla. En ese caso el título nos pareció despectivo. Después de cinco años en la música que digan que te quieres parecer a otra banda no es agradable.

¿Qué se siente cuando la música pasa de ser un hobby a un oficio?

Alegría. En nuestro caso fue una apuesta personal y económica y como cualquier negocio, cuando ves que ha habido resultados, te alegras. Ha supuesto una gran inversión, muchos quebraderos de cabeza y el escuchar cada día a tus padres decir que estás perdiendo el tiempo. Ahora ellos también están contentos.

Son de un pueblo de Jaén. ¿Todos los grupos en España tienen las mismas oportunidades o el negocio de la música está centralizado?

Hoy en día ya no existen barreras. Venimos de Baeza, un pueblo de 17.000 habitantes, pero podemos publicar nuestra música en Internet y que alguien de Nuevo México la escuche. Ahora las canciones vienen de todos los rincones del mundo.

¿Qué gustos musicales comparten todos los miembros de la banda?

Somos muy eclécticos: desde música electrónica a rock. Escuchamos Moby, Chemical Brothers y Wilco. Nos encanta el último álbum de Foo Fighters… Y nos gusta Radiohead. Siempre van un escalón por delante del resto de grupos y crean discos que al principio te parecen raros y, luego, la hostia. Eso es lo que pasa con los artistas que innovan: para ser comprendidos ha de pasar un tiempo.

Patxi López ha facilitado su ranking de mejores canciones y artistas. ¿Se atrevería a facilitar su ranking de políticos?

Nosotros estamos muy indignados. Nuestro ranking de políticos empezaría en 100 y terminaría en 50, pero los puestos del 50 al 1 quedarían desiertos. Estamos más con la gente que ha acampado en las plazas que con los políticos.

¿Necesita la música un 15-M?

El movimiento del 15-M ya se está viviendo en la música y ha tenido consecuencias en su industria. Las compañías están perdiendo poder y los grupos cada vez tienen más control sobre su trabajo, algo que se llevaba buscando desde hace mucho tiempo. Nosotros estamos en una gran discográfica, Sony, y sin embargo tenemos total libertad para crear lo que queramos. Ellos están apostando por lo que es Supersubmarina, no pretenden cambiarlo. Los sellos se han dado cuenta de que hay que dejar más libertad a los grupos y estar menos centrados en lo que es comercial y lo que no lo es. El movimiento comenzó hace tiempo y al final ha conseguido cambiar a la industria, así que esperamos que también se cumpla lo que reclaman los indignados en las ciudades.

Están en el cartel del Día de la Música, en el Arenal Sound, en el Bside… ¿hay algún festival en el que no vayan tocar este verano?

¡En el FIB! Es nuestra cuenta pendiente. El FIB es el FIB, el festival más importante de España. Hay que trabajar mucho para llegar allí. Aunque estamos contentos: estaremos, además de los que has citado, en otros de la talla de Sonorama, el Low Cost...

Con tanta gira, ¿cómo andan de grupies?

Lo del fenómenos grupie ha cambiado. Ya no se idolatra a los grupos como antes. Hoy en día cualquier miembro de un grupo tiene un perfil en Facebook con el que comunicarse directamente con sus fans y es mucho más accesible. Se ha eliminado esa distancia que convierte al artista en ídolo. Sólo se mantiene entre los adolescentes, que están un poco confusos...

Hay un tuitero que ha escrito en su perfil: "Lo de Supersubmarina no lo he entendido nunca. Acabo de escuchar una canción suya en la que parecen Camela". ¿Cómo llevan las críticas?

Siempre que sean constructivas, bien. En cuanto a lo de Camela, la verdad es que me cuesta encontrar el parecido. Las opiniones, si no se hacen con mala intención, son bien recibidas. Pero en este comentario veo un poco de... ¿mala fe?

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