El Gobierno ha pedido este martes que "no se dramatice" con la reacción del PNV de suspender su apoyo parlamentario al Ejecutivo por el veto del Supremo a las listas de Bildu, mientras esta coalición ha expresado su confianza en que el Constitucional repare el daño hecho por el Alto Tribunal.

Las reacciones a la decisión tomada el lunes por la ejecutiva nacional del PNV y el pronunciamiento que pueda realizar el Tribunal Constitucional al recurso que presentará Bildu, cuyo plazo termina este miércoles, han provocado nuevos pronunciamientos de los distintos partidos e instituciones implicadas en el caso.

De esta manera, el vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha considerado "normales" las discrepancias entre el Gobierno y el PNV por el veto a Bildu y ha pedido que no se "dramatice" por este motivo, a la vez que ha asegurado que, por su parte, el Ejecutivo no va a suspender su diálogo con la formación nacionalista vasca.

Los portavoces de Bildu, por su parte, se han desplazado a Madrid para dar una conferencia de prensa en el Congreso de los Diputados, a invitación de ERC e ICV, que finalmente se ha tenido que celebrar en la calle, al prohibirles el presidente de la Cámara Baja, José Bono, su acceso al edificio. En la comparecencia, Pello Urizar, secretario general de EA, ha expresado su confianza en que el Tribunal Constitucional "repare el daño" hecho por el Supremo, mientras Oskar Matute, líder de Alternatiba,  ha asegurado que la apuesta de Bildu por la paz "beneficia a todos, tanto a la sociedad vasca como a la española".

Esta coalición se manifestará este miércoles en Bilbao, donde sus seguidores se quedarán reunidos hasta conocer el fallo del Constitucional.

Por su parte, el lehendakari, Patxi López, ha subrayado que "ni EA ni Alternatiba forman parte de la estrategia de ETA" y que en las candidaturas "hay muchos hombres y mujeres que tienen una trayectoria personal y política con un inequívoco compromiso democrático y de oposición a la violencia". En cuanto a la decisión del PNV de "suspender" su colaboración con el Gobierno, el lehendakari ha dicho que esta postura le parece "de poco rigor democrático" y les ha acusado de "hacer permanentemente acusaciones de juego electoral con este asunto", cuando "son los primeros que han asumido el papel de víctimas, que no les corresponde en absoluto, y los que juegan a buscar votos casi de manera desesperada".

Desde el PNV, su presidente, Iñigo Urkullu, habló por teléfono con Zapatero, una conversación sobre la cual el portavoz parlamentario de este partido, Josu Erkoreka, ha explicado que concluyó con un "cierto compromiso para darnos un tiempo, un margen de confianza, ver cómo se pronuncia el Tribunal Constitucional y, a partir de ahí, retomar unas conversaciones para recuperar una sintonía que en este caso no se ha dado".

Distintos portavoces del PP, por su parte, han criticado al PNV por abandonar al Gobierno por el veto a las listas de Bildu cuando, en su opinión, deberían de haberlo hecho cuando el año pasado aprobó los recortes sociales para combatir el elevado déficit del Estado. La secretaria general de esta formación, María Dolores de Cospedal, ha confiado en que la sentencia que el Tribunal Constitucional "ratifique" lo que ha dicho el Supremo y ha agregado que esta ratificación la espera "una inmensa mayoría de españoles, de todas las tendencias políticas".