Una chica parece haberse caído del asiento de su coche. Sus gafas de sol están torcidas y por el suelo hay de todo: un tacón de Louboutin, pintalabios de YSL, su bolso Dior...

Se trata de una imagen que se ha viralizado porque es el nuevo challenge que circula por Asia: el desafío de las estrellas fugaces o que caen. Consiste en que sus protagonistas publiquen imágenes suyas con todas sus posesiones de lujo dispersas a su alrededor. Se cree que esta moda comenzó en Rusia como una manera de mostrar productos caros.

La tendencia en China la llevan acabo los millennials con un poder adquisitivo elevado. En un post de Instagram, se ve a una joven en el suelo de un aparcamiento después de que aparentemente se cayese al salir de un Ferrari.

Sin embargo, el challenge está empezando a tener su consecuencias negativas para los que lo llevan acabo. Dos mujeres tiradas en un paso de peatones con sus bolsas de Gucci recibieron una multa por interrumpir el tráfico mientras hacían la payasada.

En Shanghai, una mujer que posaba al caer de un Aston Martin se llevó de regalo a casa otra multa.