La serie de El juego del calamar, Squid Game en inglés, de Netflix, es un fenómeno social que se ha visto en unos 142 millones de hogares en todo el mundo desde que llegó a la plataforma el 17 de septiembre.

Pero lo que para la mayoría no es más que una serie que se deja ver para la streamer Lydia Ellery está siendo un auténtico infierno pues su nombre de usuario en redes sociales es @SquidGame o @SquidGaming, un nombre que eligió al azar allá por 2010, mucho antes de que apareciera la serie. 

Y es que ahora la escriben miles de personas y muchas de ellas con faltas de respeto o con mensajes de odio y muchos otros han tratado de piratearle las cuentas por la asociación que hacen con la serie. 

"Empecé a recibir mensajes abusivos de la gente", dijo Ellery a la BBC. "La gente se estaba enojando conmigo porque son fans y piensan que me he apropiado de la cuenta de la serie. Tuve que desactivar las notificaciones en mi Instagram porque era constante. Mi teléfono se ha inundado", decía la mujer, que baraja ahora cambiar su nombre de usuario.

"Parece que, después de todo, tendré que cambiar mi usuario. Perdí 2 oportunidades increíbles de publicidad porque la gente no quiere contratarme con mi nombre de "juego del calamar". Esto realmente me está deprimiendo", decía la joven en su cuenta de Twitter, donde tiene casi 48.000 seguidores, a los que se suman los 33.000 de Instagram y 44.000 de Twich.