La prensa inglesa, en su modestia, ya lo llama 'El Disneyland Londinense', aunque por ahora su nombre es solo London Resort. Hablamos de un parque de atracciones gigantesco (aproximadamente 465 hectáreas) que se situará en Kent, un municipio al este de Londres, en una península bañada por el Támesis.
El parque de atracciones contará con seis áreas temáticas. La primera será The Studios, con atracciones y espectáculos dedicados a grandes éxitos de acción del cine.
Justo al norte se encontrará The Woods, un reino encantado donde la primavera reina eternamente y la frontera entre la realidad y la fantasía se disuelve, según reza el proyecto.
El Reino se dedicará a un mundo inmersivo de espadas, hechicería, dragones y leyendas, un viaje a una Inglaterra oscura y antigua, un lugar de castillos imponentes y amenazantes y leyendas místicas artúricas.
The Isles es una tierra de criaturas gigantes, bestias míticas y aventuras en la encrucijada de la imaginación y la realidad.
Es aquí donde los dinosaurios cobrarán protagonismo, pues los diseñadores del parque han pensado entre otras, una atracción con la que se puede volar colgado de un quetzalcoatlus, un dinosaurio alado, con velocidades de 112 kilómetros hora o bucear en aguas prehistóricas.
En The Jungle encontraremos atracciones, como en el resto de áreas, pero ambientadas en las ruinas antiguas de una misteriosa civilización mesoamericana perdida hace mucho tiempo.
Y la tierra final estará dedicada a experiencias futuristas, encuentros con extraterrestres y grandes atracciones.
El parque comenzará las obras en 2022 y se espera que esté abierto y operativo para 2024.
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