Un extrabajador de Walmart que salió de esa empresa de supermercados de EE UU más que descontento decidió vengarse destrozando la tienda donde había estado trabajando y en la que se había sentido maltratado. 

Lacy Cordell Gentry, de 32 años, atacó el Walmart de Concord, en Carolina del Norte, con un Volkswagen Passat, con el que atravesó el escaparate del supermercado para después ponerse a recorrer la tienda arrasando todo a su paso. 

El incidente ocurrió a las 6 de la mañana, antes de que abriera la tienda, por lo que no había clientes adentro, aunque sí empleados, que tuvieron que ponerse a refugio del conductor, que iba recorriendo los lineales de productos, causando "daños sustanciales y poniendo en peligro a otros", según la policía. 

Cuando llegó la policía el exempleado aún circulaba por el súper con su coche y tras unos tira y aflojas consiguieron que bajara del vehículo y fue detenido. 

Fue acusado de dos delitos graves de asalto con un arma mortal a un funcionario del gobierno, delito grave de allanamiento de morada, dos delitos menores de asalto con un arma mortal y otros cargos relacionados con daños a la propiedad.

El empleado había sido despedido apenas una semana antes, por causas que no han trascendido, pero según publican medios locales, el autor de los hechos había escrito en su Facebook: "Solo vigilan a los asociados y los negros. Dejan que todos los blancos hagan lo que quieran como si fueran privilegiados".