El gigante senegalés Tacko Fall lo tiene todo para triunfar en el baloncesto. O más bien, casi todo. Su estatura, 2,29 metros, le convierte en un pívot temible que, no obstante, aún debe pulir su técnica. Y especialmente, en los tiros libres.

Fall juega en los Knights de la Universidad de Florida Central, en la liga universitaria. Su peculiar mecánica está dando la vuelta al mundo. Las redes sociales difunden varios vídeos con sus lanzamientos a una mano, que sólo tocan el aro en el mejor de los casos.

Fall, de 21 años, disputa su cuarta temporada en la liga universitaria de baloncesto de Estados Unidos (NCAA). El jugador está por debajo del 30% de porcentaje de acierto.