El GP de Bahréin le ha demostrado a  Charles Leclerc lo cruel que puede ser la Fórmula 1. El piloto monegasco se quedó 10 vueltas de ganar su primera carrera en el Gran Circo, pero un fallo de su motor le hizo perderla para tener que conformarse con un tercer puesto que le sabe a muy poco. La victoria fue para un Lewis Hamilton que no se creía lo que había logrado, por delante de un Valtteri Bottas, que sigue siendo líder del Mundial por un punto.

La carrera empezó con problemas para Ferrari, que pese a sumar su primer podio de la temporada no salen nada satisfechos. En los primeros metros, Sebastian Vettel le ganó la posición a un Leclerc que pagó la novatada. Pronto se vio tercero, y parecía que iba a ser una batalla a dos entre Hamilton y el líder teórico de la Scuderia. Sin embargo, pronto el joven diamante monegasco demostró que no iba a entregar la espada tan fácil.

Tras un magnífico adelantamiento sobre su jefe de filas, se colocó primero, mientras a Vettel le empezaban a flaquear las fuerzas. En las paradas en boxes, Mercedes le dio una lección (otra más) al muro de Ferrari, y le ganaron la batalla por el segundo puesto al alemán, que por cuarta vez en este fin de semana destrozaba un juego de neumáticos con un trompo.  Las vibraciones consecuentes hicieron saltar por los aires el alerón delantero del SF90 y, con ello, las opciones de podio del tetracampeón del mundo.

Todo parecía estar atado para que Leclerc lograse una histórica primera victoria para él, con los Mercedes detrás, pero lejos de su primera posición. Sin embargo, aprendió por las duras lo que supone la Fórmula 1: a falta de 10 vueltas para el final, tras notar que algo no iba bien, vio cómo se quedaba sin 160 CV de golpe, debido a un fallo del MGU-H de su Ferrari. Primero le adelantó Hamilton y después Bottas, que consumaron un inesperado doblete en un circuito donde no aspiraban a nada más que a minimizar daños. De no ser por el abandono de los dos Renault que hizo salir el coche de seguridad, Leclerc ni siquiera hubiera alcanzado el podio.

Carlos Sainz no tuvo suerte tampoco este año. En un circuito en el que no ha puntuado nunca, acabó abandonando a falta de dos vueltas para el final. Todo comenzó al principio, cuando salió derrotado de un duelo cuerpo a cuerpo con Verstappen mientras peleaban por la sexta plaza. El madrileño suma dos carreras sin acabar, mientras su compañero Lando Norris ha sido 6º con una gran actuación y los primeros 8 puntos para McLaren en 2019.