Nick Kyrgios se confirmó como el tenista más polémico del circuito mundial tras ser expulsado del Masters 1000 de Roma por su indisciplina y falta de respeto en el partido frente a Casper Ruud.

El australiano ya protagonizó un lamentable show en su primer partido en el Foro Itálico, en el que llegó a enseñar el trasero a Medvedev, pero rizó el rizo en el encuentro de segunda ronda, cuando lanzó una silla a la pista y fue inmediatamente descalificado.

No obstante, las pistas de tenis han sido testigos de todo tipo de enfados, que van desde tenistas legendarios como John McEnroe, Rafa Nadal, Roger Federer, Novak Djokovic o Serena Williams hasta los sonados mosqueos de Donaldson, Troicki, Granollers o Mikhail Youzhny.

El mítico John McEnroe alcanzó la fama tanto por su juego como por sus salidas de tono. El estadounidense fue uno de los grandes talentos del tenis, pero también dejó para la historia sus monumentales enfados y enfrentamientos con los jueces. Uno de los más sonados se produjo en las semifinales del torneo de Estocolmo 1984, cuando recibió varios ‘warning’ y su enfado le llevó a amenazar con abandonar el partido.

Uno de los momentos más surrealistas de la historia del tenis lo protagonizó el temperamental Mikhail Youzhny en el Masters 1000 de Miami 2009, cuando se enfrentaba al español Nico Almagro. El ruso perdió los nervios en el tercer set tras fallar un golpe y se golpeó la cabeza con la raqueta varias veces, provocándose una brecha en la frente que le obligó a solicitar asistencia médica.

Rafa Nadal también ha vivido situaciones de máxima tensión a lo largo de su dilatada trayectoria. Uno de sus enfados más recordados se produjo en la Copa de Maestros de 2010, cuando se enfrentó al juez de silla brasileño Carlos Bernardes. Nadal entró en cólera porque el árbitro dio un punto a Berdych tras una revisión del ojo de halcón y él defendía que el punto debía repetirse porque había devuelto el resto.

Viktor Troicki dejó uno de los momentos más insólitos que se han visto en unas pistas de tenis. El serbio se enfrentaba a Gulbis en el Masters 1000 de Roma cuando le cantaron una bola fuera. El tenista se negó a aceptar la decisión del árbitro y cruzó la pista para comprobar que su golpe fue bueno, lo que aumentó su enfado. Tras una discusión con el juez de silla, el tenista cogió del brazo al cámara de pie de pista y le llevó hasta la marca para que registrara la imagen.

Los genios también pierden los nervios, como demostró Roger Federer en su duelo de Indian Wells 2013 frente a Novak Djokovic. El suizo veía cómo el serbio le estaba remontando el encuentro y un error propio le hizo pagar su enfado con la raqueta, pues la estampó contra el suelo partiendo el cuadro.

El legendario All England Tennnis Club, organizador de Wimbledon, también ha sido escenario de célebres enfrentamientos entre tenistas y árbitros. Fabio Fognini dejó al público boquiabierto en 2013 después de que le dieran una bola por mala en su partido frente a Melzer. Se tiró al suelo para mostrar su mosqueo y acto seguido protestó al juez de silla moviendo agitadamente los brazos.

Marcel Granollers dejó su huella en el ATP 250 de Montpellier 2017, aunque en un sentido negativo. Y es que el español se enfureció porque el juez le dio una bola dentro a su rival en el partido de primera ronda frente a Chardy. La tensión fue a más, ya que el español llegó a decir al árbitro "no me toques los cojones". El tenista también golpeó violentamente el banco asignado para sus descansos con la raqueta, ganándose una sonora pitada del público.

La francesa Myrtille Georges se hizo un hueco en la lista de los mayores enfados del tenis en la Copa Hopman 2018. Una decisión del juez de silla provocó su enfado, ya que le marcó una doble falta con la que perdía el partido frente a Gabriella Taylor. La tenista también perdió los nervios y terminó gritándole y dedicándole aplausos de forma irónica.

Jared Donaldson fue públicamente condenado tras encararse con el juez de silla del partido que le enfrentaba al español Albert Ramos-Viñolas en el Masters 1000 de Montecarlo 2018. El estadounidense perdió los estribos y protagonizó uno de los mayores escándalos que se recuerdan, pues se encaró con el árbitro en tono desafiante y casi llega a las manos.

Uno de los últimos escándalos también fue uno de los más mediáticos. Se trata del monumental enfado de Serena Williams tras recibir un aviso por ‘coaching’ en el US Open 2018. La estadounidense perdió los nervios ante Osaka y los papeles ante el colegiado. Williams insultó al colegiado tras recibir un aviso por 'coaching' y comenzó una polémica que tuvo varios capítulos por las sanciones que recibió.

Ser el número 1 del mundo no quiere decir que no se puedan perder los nervios. Lo demostró Novak Djokovic hace solo unos meses en Qatar. El serbio perdió su saque en el segundo set de su duelo frente a Roberto Bautista Agut tras enviar la bola fuera y su acto reflejo fue reventar la raqueta contra el suelo hasta en tres ocasiones.