El racismo vuelve a ensuciar el fútbol español: clamor por lo ocurrido este fin de semana en Getafe y Sestao

Saar, portero del Rayo Majadahonda, se engancha con un aficionado rival.
Saar, portero del Rayo Majadahonda, se engancha con un aficionado rival.
CAPTURA
Saar, portero del Rayo Majadahonda, se engancha con un aficionado rival.

Día duro para el fútbol español el que se vivió este sábado por los episodios racistas que se dieron en Getafe y Sestao, donde aficionados de los conjuntos locales lanzaron insultos racistas a Marcos Acuña y Quique Sánchez Flores, del Sevilla, y Saar, guardameta del Rayo Majadahonda.

En el encuentro de la jornada 30 de LaLiga disputado entre el Getafe y el Sevilla en el Coliseum, el árbitro Iglesias Villanueva tuvo que parar el partido en el minuto 68 tras escuchar el linier insultos racistas dirigidos a Marcos Acuña, jugador del conjunto hispalense.

Rápidamente, se dirigió al delegado del Getafe, Manuel Mejuto González, para que exigieran por megafonía el cese de esos cánticos. Y reflejó en el acta todo lo ocurrido: "En el minuto 68 tuve que detener el encuentro debido a que se produjeron insultos racistas sobre el dorsal 19 del equipo visitante, con palabras como 'Acuña mono' y 'Acuña vienes del mono' desde aficionados situados en la zona central del campo detrás de la posición de mi árbitro asistente".

Al término del encuentro, Sergio Ramos sacó la cara por su compañero: "Venimos reclamando respeto, que no vengan a liberarse y decir tonterías. El linier escuchó el insulto y el colegiado paró el partido. Hay que limpiar la imagen del fútbol".

"El Sevilla FC condena los insultos racistas y xenófobos sufridos este sábado por su jugador Marcos Acuña y su cuerpo técnico durante el Getafe-Sevilla FC", señaló a su vez el Sevilla en sus redes sociales.

Y desde el otro lado, Djené, defensa del Getafe, también habló de este episodio racista en los micrófonos de DAZN: "Ha dicho que hay un cántico, pero no escuche nada. Creo que si hay un cantico aquí tiene que pararse porque eso no puede ser".

A la crítica del jugador azulón se unió la de su entrenador, Bordalás: "No he oído nada, si el árbitro y Acuña lo han oído, es normal, estoy de acuerdo que se haya activado el protocolo. Estoy en contra de cualquier cántico aunque sea en nuestro estadio y hay que acabar con ello. Llevamos tiempo denunciándolo y hasta que no se tomen medidas serias, vamos a seguir oyéndoles. Nuestros jugadores también lo han sufrido en muchos escenarios", afirmó.

Quique Sánchez Flores, también víctima del racismo

Pero los insultos racistas no solo fueron dirigidos a Marcos Acuña en el Coliseum. Tras el encuentro, Quique Sánchez Flores, entrenador del Sevilla y con pasado en el Getafe, denunció que unos aficionados le habían llamado de forma despectiva "gitano".

"Estoy orgulloso de cada poro que pueda respirar gitano, pero una cosa es ser gitano o parte, y otra que lo utilicen como insulto racista, me parece aberrante", dijo el madrileño.

"Aquí parte del público se cree que puede venir a decir lo que quiera, es lo que está pasando en el fútbol. Nosotros somos trabajadores, se nos tiene que respetar. En estos tiempo, nos agarran para atrás y nos dicen cosas que se salen de cualquier espacio de convivencia. Ha habido aficionados del Getafe que han estado en contra de otros aficionados", añadió.

Además, insistió en la necesidad de tomar medidas contundentes y lamentó no tener el ambiente de otros deportes. "Es lamentable, más allá de que he sido en un campo donde he tenido muchas historias. Si entre todos no hacemos algo no habrá la oportunidad de dar un espacio, como van al tenis, al baloncesto, al golf, a otros deportes donde la gente va a pasarlo bien, no a insultar", apuntó.

Y horas después... otro brutal episodio en Sestao

Tras el episodio racista en Getafe, en el Sestao River-Rayo Majadahonda de Primera Federación ocurrió algo muy parecido, pero que acabó con el portero visitante, Cheikh Kane Sarr, enganchado con la grada y posteriormente expulsado.

Corría el minuto 87, con 2-1 en el marcador, cuando el guardameta se encaró a los aficionados del Sestao situados detrás de su portería, desde donde presuntamente le lanzaron insultos racistas.

Los compañeros del guardameta tuvieron que ir a separarlo de los aficionados y finalmente todos se dirigieron a los vestuarios, negándose a regresar al terreno de juego para disputar lo que restaba de tiempo.

"El arbitro suspende porque nosotros nos negamos a jugar. Parece ser que a raíz del segundo gol del Sestao nuestro portero llevaba tiempo recibiendo algunos insultos racistas, pero a partir de ahí la cosa se ha complicado. Había un grupo bastante numeroso detrás de esa portería y le han empezado a insultar llamándole negro", afirmó el vicepresidente del Rayo Majadahonda, Iñaki Acha, en Carrusel Deportivo.

El vicepresidente del club madrileño añadió que "él (Sarr) ha perdido un poco los papeles porque ha saltado la valla, cosa que no tenía que haber hecho nunca. Y a partir de ahí el arbitro lo ha expulsado". "Se ha ido hundido al vestuario y los compañeros se han ido con él y no han querido volver a salir al campo", señaló.

"Los antidisturbios de la Ertzaintza han desalojado el fondo, el portero estaba totalmente hundido, los jugadores no han querido salir" y "el arbitro suspende porque nosotros nos negamos a jugar", relató.

El Rayo Majadahonda informó: "Nuestro equipo no saldrá de nuevo a reanudar el encuentro tras recibir insultos racistas inadmisibles a nuestro jugador". "Condenamos todo tipo de insultos racistas en el deporte", añadió el club madrileño.

Jorge Casado, compañero de Saar en el Rayo Majadahonda, tampoco se quedó callado en las redes sociales: "Es una vergüenza lo sucedido hoy. Una sección del campo propinando insultos racistas a Cheick Sarr por su color de piel. Siento vergüenza. Parece mentira, año 2024".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento