El macizo de Annapurna (Gandaki, Nepal) cuenta con varios picos, el más alto, el Annapurna I, de 8.091 metros, la décima montaña más alta del mundo. Fue ascendida por primera vez el 3 de junio de 1950 por Maurice Herzog y Louis Lachenal, convirtiéndoase en el primer "ochomil" en ser ascendido, un reto que años más tarde animaría a una expedición polaca a afrontar el peligroso reto de coronar su cima durante la dura estación invernal en condiciones infrahumanas.
Un equipo polaco formado por Jerzy Kukuczka (líder), Jacek Palkiewicz, Artur Hajzer, Wanda Rutkiewicz, Michel Tokorzewski, Ryszard Warecki y Krzysztof Wielicki, llegó al campamento base de Annapurna el 18 de enero de 1987, con la intención de escalarla por la ruta de la cara norte que fue la ruta de los franceses en 1950. El grupo no usó oxígeno suplementario durante la expedición y no fueron asistidos por sherpas por encima del campamento base en ningún momento.
Sin perder tiempo, dos días después de alcanzar el campamento base, tres miembros del equipo polaco establecieron el campo 3 a la altura de 6.100 metros, donde pasaron una noche. El día siguiente, el 23 de enero, el grupo avanzó 100 metros más para arriba, pero luego retrocedieron y volvieron al campamento base porque Wanda no se encontraba bien y porque las condiciones climáticas tampoco acompañaban al grupo. Al nevar mucho, la nieve estaba muy suelta y el tiempo fue muy cambiante durante su progreso.
El 27 de enero tres miembros del grupo comenzaron a ascender de nuevo. Dos días más tarde, los alpinistas llegaron al campo tres, de donde posteriormente se dirigieron a un corredor peligroso cubierto de hielo duro, constantemente amenazados por avalanchas de nieve y caída de piedras y de enorme trozos de hielo. Pasaron aquella noche a 6.500 m, cerca del corredor. Fueron horas infernales para los polacos en ese lugar, porque las piedras que bombardeaban desde arriba destrozaron su tienda de campaña. A pesar de ello tuvieron suerte y pudieron seguir hasta el campo 4, situado a 6.800 metros.
El 1 de febrero dos de los miembros - a falta de aclimatación suficiente- tuvieron que abortar el ataque a la cima y darse la vuelta. Sin embargo, dos del grupo, Hajzer y Kukuczka no se rindieron y en medio de una nevada fuerte y con una visibilidad de menos de 40 metros, consiguieron alcanzar el campo 5 a la altura de 7.400 metros sobre un terreno de hielo. Allí, debido al cansancio por la jornada anterior, decidieron posponer el ascenso para el 3 de febrero de 1987, día en el que Hajzer y Kukuczka consiguieron hacer cumbre a las 4 de la tarde consiguiendo así la primera ascensión invernal del Annapurna I (la 'Diosa de la Abundancia', como significa su nombre).
Otro intento por la cara sur
A finales del mismo año, en noviembre de 1987, un grupo japonés liderado por Kuniaki Yagihara llegó al campamento base de Annapurna I con el mismo objetivo, ascender la montaña en la época invernal, esta vez por la cara sur. Esta expedición es generalmente menos conocida, pero merece la pena de recordarla. El equipo de los 14 alpinistas japoneses tampoco usó oxígeno suplementario. Finalmente, cuatro miembros de la expedición japonesa lograron hacer cumbre el 20 de diciembre a las 15.15 horas, un día antes del comienzo del invierno astronómico: Noboru Yamada, Toshiyuki Kobayashi, Yasuhira Saito y Teruo Saegusa llegaron a la cima. Pero la tragedia llegó pronto.
Durante el descenso, el mismo día 20 de diciembre de 1987, a las 5 de la tarde, Kobayashi de 22 años se resbaló y sufrió una caída mortal desde 7.900 m. Dos horas más tarde, otro compañero, Saito de 34 años, cayó también, de la altura de 7.420 metros, desapareciendo en el abismo. Más tarde azotaron la ruta avalanchas, y en una de ellas uno de los escaladores del grupo y un sherpa resultaron heridos.
Aunque la ascensión de los japoneses no se la puede considerar como una ascensión invernal en toda regla por haber sido llevado a cabo tan sólo un día antes del inicio del invierno astronómico, es justo darles su lugar en la historia del alpinismo.
Desde su primera ascensión hasta 2022, 395 personas coronaron Annapurna I, y en torno a 222 personas lo lograron sin el uso de oxígeno suplementario. Siendo uno de los picos más peligrosos entre los ochomiles, hasta nuestros días, más de 70 personas perdieron la vida en este pico. Ahora, con la llegada del invierno, Alex Txikon tratará de replicar la gesta de polacos y japoneses intentada por tan solo 22 grupos a lo largo de toda la historia.
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