Por fin hay tregua. Tras una serie de largas reuniones que finalizaron pasadas las 4 de la madrugada del martes al miércoles en el que tomaron parte las internacionales españolas, Víctor Francos en representación del CSD, miembros de la Federación Española y la nueva seleccionadora Montse Tomé, se logró desbloquear un conflicto que ni mucho menos se ha solucionado todavía, pero en el que todas las partes han cedido para que no haya un adiós masivo de jugadoras en al concentración y que el partido de mañana en Suecia –clave para lograr el billete para los Juegos de París 2024– se pueda disputar.

La postura de las futbolistas españolas era clara. Exigían cambios radicales en la RFEF o amenazan con abandonar la concentración y no jugarían el partido ante las suecas. Víctor Francos les garantizó que habría despidos en la Federación en las próximas horas y que no habría sanciones para las jugadoras que decidieran abandonar la concentración, y ello pareció convencer al grueso de las internacionales.

Tras una reunión entre ellas y otra de bastante tensión con Montse Tomé, finalmente 21 jugadoras decidieron continuar en la concentración. Mapi León y Patri Guijarro –formaron parte de ‘las 15’ que renunciaron en septiembre de 2022 a la selección y llevaban más de un año sin acudir con la Roja– fueron las únicas que decidieron irse. "No han sido las maneras ni las formas de volver y no estamos en condiciones. Esto es un procesos", dijo Mapi. "Estamos con nuestras compañeras, pero sí que es una situación diferente y es bastante duro. Personalmente, estar aquí, como ha acontecido todo... mentalmente no estás", explicó Guijarro.

La RFEF despide a Andreu Camps, mano derecha de Rubiales

Ya por la tarde, la RFEF emitió un comunicado en el que le pedía por primera vez disculpas a Jenni Hermoso y también extendía su petición de perdón al resto de las jugadoras, asegurando que la intención con esta convocatoria no era la de crear un clima de tensión ni presionar a las futbolistas españolas.

Después, Montse Tomé dirigió su primer entrenamiento como seleccionadora nacional. Una sesión suave de algo más de una hora que comenzó tarde –estaba prevista para las 17.30 y lo hizo casi a las 18.30– antes de que las internacionales se ejercitaran posteriormente en el gimnasio. 

Tras el entrenamiento, se dejó ver a Alexia Putellas. Sonriente, firmando autógrafos pero contundente: "No me quedo precisamente por estar a gusto", aseguró. Ya por la noche, menos de 24 horas después de las distintas reuniones, llegó el primer despido. El nombre de Andreu Camps era el que estaba más cantado, pues era de la mano derecha y hombre de la máxima confianza del anterior presidente de la Federación Española, Luis Rubiales.

Alexia Putellas, rotunda: "No me quedo precisamente por estar a gusto"

"La RFEF ha prescindido hoy de los servicios del secretario general, Andreu Camps", anunció la Federación. "A partir de este momento, y en este tiempo de transición hasta la finalización del proceso electoral, sus funciones serán asumidas por la directora del Gabinete de la Presidencia, Elvira Andrés, en el ámbito representativo como secretaria de los órganos de gobierno y representación de la Federación. Asimismo, las funciones ejecutivas las asumirá Alfredo Olivares, actual director de Competiciones", rezaba el escrito.

Ha caído la cabeza más visible del denominado ‘Rubialismo’, pero ni mucho menos va a ser la única. Entre hoy y mañana, antes de que empiece el partido ante Suecia, se espera alguna más. También habrá más destituciones durante toda la concentración, que finaliza el próximo martes.

Será entonces cuando se aborde el futuro de Montse Tomé. La seleccionadora no goza de la confianza de las jugadoras, que no entienden qué le llevó a decir que había hablado con ellas antes de dar su convocatoria, cuando en la mayoría de los casos no fue así. Todo apunta a que su andadura como seleccionadora nacional va a ser breve.