El COE recibe con honores a los Hispanos tras la conquista de un bronce histórico

La selección española de balonmano en la sede del COE.
La selección española de balonmano en la sede del COE.
EFE
La selección española de balonmano en la sede del COE.

La selección española masculina de balonmano ha sido recibida este martes en la sede del Comité Olímpico Español (COE) tras la conquista de la medalla de bronce en el Mundial, que se disputó en Polonia y Suecia del 11 al 29 de enero, torneo en el que los 'Hispanos' demostraron de nuevo su "gen competitivo" para convertirse en "uno de los mejores representantes del deporte español en la historia".

Los jugadores, liderados por el seleccionador nacional, Jordi Ribera, estuvieron acompañados por el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta; el presidente del COE, Alejandro Blanco; y el de la Real Federación Española de Balonmano (RFEBM), Francisco V. Blázquez.

Este fue el encargado de abrir el acto, pidiendo "poner en valor" lo logrado por la plantilla desde que en 2013 se hicieran con el oro mundial -el segundo en la historia del balonmano español-, una medalla a la que siguieron otros nueve metales en grandes torneos. "Nos tenemos que dar cuenta de que olvidamos muy rápido los éxitos. Luchamos con otras federaciones con más presupuesto, esto habla del 'gen hispano'", destacó.

"Es algo histórico, es un bronce para saborear y disfrutar. Nos deja en una posición óptima para conseguir la clasificación para los Juegos. La continuidad de medallas parece sencillo, pero hacerlo año tras año es lo más importante", agregó sobre la gesta.

Y para Blázquez, las claves son "trabajo, humildad, sacrificio y respetar al rival". "Hablar de Hispanos es hablar de valores, de luchar cada segundo y cada minuto. El equipo puede ir perdiendo, pero es capaz de reponerse, así somos los españoles, quizá no somos los más grandes ni los más fuertes, pero somos los que tenemos ese ADN dentro que nos hace ser los más competitivos", elogió.

Así, aprovechó para elogiar la labor del cuerpo técnico, con Jordi Ribera a la cabeza, intentando "dar el máximo de viveza al partido y poniendo tensión". "Tras el susto ante Noruega puedo decir que no necesito una revisión del corazón. Este es el gen hispano, cada partido es una guerra", comentó sobre los cuartos de final ante Noruega, duelo en el que España venció tras dos prórrogas.

El propio Ribera hizo balance de un Mundial "muy exigente", en el que también era "importante conseguir la plaza del preolímpico" de cara a París 2024. "A partir de los cuartos teníamos la mirada en la ilusión de poder llegar a la final. Nos tocó la mejor Noruega, dimos el espíritu de que no hay un partido perdido", recordó.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento