La demencia es una dura enfermedad que va minando la memoria poco a poco. Los recuerdos del día a día, de toda una vida, van desapareciendo progresivamente. Esto provoca que la persona apenas se acuerde de todo lo sucedido.

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A pesar de esa crudeza hay momentos de lucidez en aquellos que lo sufren. Y si no, que se lo digan a Charlie Gibson, que decidió aventurarse y llevar a su abuelo a ver el último partido de liga del Manchester City.

“Mi abuelo tiene 84 años, ha sido fan del City desde que tiene seis años. Pese a que su condición ha empeorado mucho y he decidido llevarlo a un partido muy importante. El club nos dio dos entradas. Vengan a ver cómo le alegran la vida”, comenzaba relatando el joven en una historia que se ha hecho viral.

No todo fue perfecto en el trayecto al estadio. Barry Carr, fruto de su enfermedad , llegó a provocar el rechazo de su nieto en el coche durante el camino. “Empezó a desvanecerse y olvidó mi nombre así que sólo tomó mi mano”, señala el joven durante el vídeo.

“Llegamos al estadio y su rostro se iluminó”, fue la alegría que le reportó su abuelo a la entrada al Etihad Stadium. “Se acordaba de las canciones, es como un hooligan”, continuaba.

“Es un recuerdo increíble tenerlo, él es un fanático del City hasta la médula, y el resultado lo hizo sentir como una montaña rusa”, señaló el nieto sobre lo vivido en el campo. 

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“Fue un día emotivo, tenemos una relación increíble, él es mi verdadera conexión con el City y esta es mi forma de devolverle algo”, sentenció Charlie Gibson al explicar lo sentido junto a su abuelo.