El sexto partido de las Series Mundiales de béisbol, que terminó con triunfo y título para Los Angeles Dodgers, dejó una situación de lo más rocambolesca. El tercera base del equipo californiano, Justin Turner, tuvo que retirarse del campo en pleno partido al conocer que había dado positivo por coronavirus.

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La polémica no terminó ahí, ya que tras la victoria de su equipo no dudó en salir a celebrarlo con sus compañeros.

El protocolo de la MLB dicta que todos los jugadores que van a jugar deben someterse a un test, pero este encuentro comenzó sin tener el total de resultados y la notificación del positivo de Turner no llegó hasta la segunda entrada del partido.

El jugador estaba en el campo, así que la Major League obligó a los Dodgers a sustituirlo para que se pusiera en cuarentena. La situación generó mucha confusión, ya que en el momento no se explicó por qué Turner abandonaba el campo. 

No obstante, poco después se avivó la polémica, cuando Turner fue captado en mitad de la celebración del equipo, que fue televisada por Fox Sports 1, abrazándose a sus compañeros. También se le vio haciéndose fotos con el trofeo en brazos e incluso se quitó la mascarilla para tomarse la foto de equipo.

Desde los Dodgers reconocieron que "si hay gente a su alrededor sin mascarilla no es lo ideal, la verdad", pero sus compañeros trataron de jusficarlo.

Corey Seager declaró en Fox Sports que "ese hombre más que nadie merece hacerse una foto con el trofeo, celebrar con nosotros y tener a su familia al lado disfrutando de este momento". Y su compañero Mookie Betts, siguió por la misma línea: "Olvídate de todo. Es parte de nuestro equipo".