Valtteri Bottas se ha convertido en el primer ganador de la temporada 2020, tras una intensa carrera en el GP de Austria en el que sostuvo la ventaja desde el principio. El finlandés tuvo que aguantar a su propio compañero, un Lewis Hamilton que se cayó del podio en las últimas vueltas por sacar de pista (como en Brasil 2019) a Alex Albon.

El trompo de Vettel sobre Sainz en el GP de Austria que deja clara su desesperación

Como en aquella ocasión, su error propició un podio de McLaren, en este caso de Lando Norris, que se estrenó en el cajón. La segunda plaza fue para un Charles Leclerc que salvó los muebles, con solvencia, para Ferrari. Carlos Sainz acabó 5º, pero estuvo con muchas opciones de podio.

La primera carrera de la temporada 2020 no defraudó en absoluto. El resultado final, con nueve abandonos, da buena muestra de lo caótico. Irónicamente, menos en la salida que suele ser muy movida, hubo de todo.

El primer golpe de efecto lo protagonizó el ganador en las últimas dos visitas al Red Bull Ring. Max Verstappen fue el primer abandono de la temporada, por culpa del anticalado de su Red Bull que le dejó tirado.

Vistos los problemas de los Ferrari, ya desde el sábado, y el abandono de Verstappen, los hombres de McLaren se frotaron las manos. Tanto, que Norris y Sainz se las tuvieron entre ellos en un momento en el que incluso saltaron chispas. Si hubieran sido otros pilotos en otro equipo, posiblemente ni uno ni otro hubieran acabado.

El respeto entre ambos se impuso, máxime cuando el clamoroso error de Vettel sobre Sainz que acabó con el germano lejos y los coches naranjas llevando la voz cantante en la zona media. 

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La carrera estaba cantada para los Mercedes desde el principio. El espectacular ritmo de Bottas, primero de principio a fin, y un Hamilton que ni la penalización sorpresiva antes de la carrera le privó de hambre, parecía que iba a garantizar un doblete de las flechas negras.

Nada más lejos. Después de dimes y diretes por radio, de órdenes de equipo más o menos claras y de avisos relativos a posibles problemas técnicos de otros coches con motores Mercedes, Hamilton dinamitó su podio por reeditar el fallo de Brasil 2019. Alex Albon, el Red Bull que quedaba vivo, volvió a perder su primer podio de nuevo tras ser embestido por el hexacampeón.

Albon no sólo perdió el podio, sino quizá algo más, ya que los sucesivos coches de seguridad propiciaron que se la jugase con un cambio de neumáticos extra y afrontar la recta final de la carrera con neumáticos blandos, mucho más rápidos que los duros ya muy usados que llevaban los Mercedes.

Alex Albon, tras ser embestido de nuevo por Lewis Hamilton: "Es un pésimo perdedor"

Este error de Hamilton, y un exceso de optimismo de Albon, le supuso un castigo de cinco segundos, que convirtieron las últimas vueltas de carrera en una frenética lucha contra el crono. Tanto fue así, que Norris se vio obligado a marcar la vuelta rápida de la carrera en el último giro para compensar esos cinco segundos.

Si en McLaren estaban exultantes, dado que con este resultado son segundos en el Mundial, en Ferrari pueden darse con un canto en los dientes con el segundo puesto de Leclerc, que ha demostrado que está muy por encima de su coche. Vettel, pese al incidente con Sainz, entró en los puntos y fue 10º. En Maranello pueden estar satisfechos, ya que el sábado parecía algo mucho peor.

Tanto para lo bueno como para lo malo, no habrá mucho tiempo para reflexionar por parte de nadie, ya que el Red Bull Ring volverá a albergar una carrera de F1 el próximo fin de semana, bajo la denominación de GP de Estiria.