Las 500 millas de Indianápolis, prestigiosa prueba de automovilismo que estaba prevista para el próximo 24 de mayo, ha sido aplazada por el coronavirus y se disputará, finalmente, el 23 de agosto.

Las 500 millas son uno de los grandes objetivos del año para Fernando Alonso quien, antes de que se iniciara el confinamiento, que él está pasando en su Asturias natal, estaba preparándose para acometer el reto por tercera vez.

Es la victoria que le falta para lograr la ansiada 'Triple corona' del automovilismo, tras haber conquistado a lo largo de su exitosa trayectoria el Gran Premio de Mónaco y las 24 horas de Le Mans.

Alonso debutó en Indianápolis en 2017, cuando rompió a falta de poco para el final cuando tenía serias opciones de ganar, y en 2019, cuando ni siquiera logró clasificarse para la carrera.

Volverá a intentarlo el próximo 23 de agosto de la mano de McLaren con quien, en principio, había roto vínculos.

"La salud y el bienestar de todos los equipos y de los fans es nuestra absoluta prioridad, así que posponer la carrera es la decisión más responsable", han indicado desde la organización.