La Consejería de Sanidad del Gobierno canario ha desaconsejado el consumo de agua corriente a los menores de ocho años que residen en un amplio sector del municipio de La Laguna. Se trata de aproximadamente 1.660 niños que viven en el casco de la ciudad y los barrios de Gracia, Barrio Nuevo, La Cuesta, Los Baldíos, Geneto, Guajara y Las Chumberas.

La situación, que ya se da en otras zonas del término municipal desde hace un año, se debe a la detección de niveles de flúor por encima de lo permitido en el agua de abastecimiento público. En concreto, estos índices alcanzan los 2,1 miligramos por litro cuando lo recomendado es 1,5.

En las zonas afectadas viven unas 35.000 personas y se ubican 19 centros escolares, en los que el Ayuntamiento de La Laguna ha distribuido agua embotellada. La empresa responsable del suministro, Teidagua, ha establecido bonificaciones para las familias abonadas en las que haya niños de menos de ocho años.

Dentadura

Las restricciones incluyen también el uso de agua para cocinar alimentos dirigidos a los niños, puesto que podría dañar sus dentaturas. Sanidad ha garantizado que el consumo no supone ningún riesgo para los adultos.

El incremento en los niveles del flúor responde a la disminución de los acuíferos, lo que ha provocado que salgan a la superficie las aguas de mayor antigüedad, que se encuentran más cercanas al magma volcánico. Esta situación se produce también en varias localidades del norte de la Isla, y podría paliarse si lloviese copiosamente y se llenaran los depósitos o si se mezclaran las aguas con las de los acuíferos del sur.

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