El destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra detuvo a un hombre de 57 años por conducir su coche con un inmovilizador que bloquea el volante con el freno después de haber dado positivo en un control de alcoholemia, razón por la cual se le colocó a su vehículo dicho inmovilizador.

A las 4,25 horas de este domingo, miembros del destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra pararon en la N-550 (Coruña-Tui), concretamente en el término municipal de Pontevedra, al conductor de un turismo Peugeot 306.

El hombre arrojó una tasa de alcohol de 0,88 y 0,86 en sendas mediciones. Por ello, el equipo de atestados de esta unidad le instruyó diligencias. Asimismo, le colocaron al vehículo un inmovilizador que bloquea el volante con el freno.

Tras marcharse del lugar, el equipo regresó minutos más tarde debido a otro cometido, momento en el que vieron que el referido conductor circulaba con su turismo dirección Pontevedra.

Al pararlo, comprobaron que conducía con el inmovilizador colocado, por lo que apenas podía mover el volante y frenar. Requerido para que saliera del coche, pues trataba de continuar su marcha, el hombre se resistió a los agentes, a quienes trató de agredir. Por ello, el hombre fue detenido.

Se trata de un varón residente en Redondela, Pontevedra, hasta donde quería llegar de ese modo. El hombre, que responde a la identidad de J.F.C. y de 57 años, tiene diversos antecedentes policiales.

El conductor ya ha sido puesto en libertad este domingo a las 12,00 horas y deberá personarse este martes 14 en el juzgado.