Tres meses de BiciMad: suben los usuarios aunque todavía hay fallos en los anclajes y el sistema

  • Tras su accidentado estreno (el 23 de junio), el alquiler de bicis de Madrid alcanza los 20.753 abonados y los 5.300 viajes diarios, el doble de los registrados en julio.
  • Las estaciones más utilizadas son la de Sol, la Cebada y Santa María de la Cabeza. Repuntan los desplazamientos por trabajo, entre jóvenes de 25 a 35.
  • Aunque los ciclistas denuncian que la tarjeta para usuarios ocasionales no está activa, los anclajes fallan, el saldo es inexacto, hay bicis estropeadas...
  • La empresa gestora admite "algunas incidencias, pero dentro de la normalidad: ahora suelen funcionar todas las bases y se resuelven los problemas al instante".
Bicicletas ancladas en la estación de BiciMad de la Puerta del Sol, la más utilizada por los usuarios.
Bicicletas ancladas en la estación de BiciMad de la Puerta del Sol, la más utilizada por los usuarios.
JORGE PARÍS
Bicicletas ancladas en la estación de BiciMad de la Puerta del Sol, la más utilizada por los usuarios.

El servicio público de alquiler de bicis de la capital (BiciMad) todavía no es perfecto, pero ya comienza a levantar cabeza. Su estreno (el pasado 23 de junio) fue accidentado: durante los primeros días la mayoría de las bases estuvieron fuera de servicio y un ataque informático llegó a introducir imágenes pornográficas en el sistema. Ahora, cuando se cumplen tres meses de funcionamiento, el número de usuarios habituales se multiplica y miles de madrileños ya utilizan la bici pública para sus desplazamientos diarios.

Actualmente, el servicio tiene registrados a un total de 20.753 abonados, según las estadísticas facilitadas este lunes por la empresa que gestiona el servicio, Bonopark. Todos ellos disponen de un abono anual, por el que pagan 15 euros (en el caso de usuarios con abono transporte) o 25 euros (para los que no lo tienen). Además de ello, tienen que abonar una tarifa por cada uso: 50 céntimos por la primera media hora y 60 céntimos por cada fracción sucesiva de media hora. Además, en septiembre se ha contabilizado una media de 5.300 viajes diarios, lo que supone el doble de usos que los registrados en julio (cuando había unos 2.500 usos al día). El jueves 12 de septiembre se alcanzó el pico máximo de desplazamientos, con 5.700 viajes, según la empresa.

Las estaciones más utilizadas son la de Sol (con 300 usos diarios de media), la plaza de la Cebada y Santa María de la Cabeza, tal y como muestran las estadísticas oficiales. "Todavía es pronto para sacar conclusiones sobre el patrón de uso, pero se ha detectado que los horarios de más uso coinciden con las entradas y salidas de las oficinas (horas punta de mañana y tarde) y en fin de semana baja la retirada de bicis, con lo que todo apunta a que se utiliza más para desplazamientos laborales y cotidianos", explica una portavoz de BiciMad. El perfil de usuario más habitual es el de un joven de 25 a 35 años (el 40,6% de los abonados tienen esa edad). "Lo positivo del servicio es que mucha gente está descubriendo que se puede utilizar la bici como medio de transporte rutinario", apunta Juan Merallo, portavoz de Pedalibre.

Sin embargo, los fallos no han desaparecido del todo: según denuncian los colectivos ciclistas, los anclajes fallan a la hora de entregar las bicis, la tarjeta para usuarios ocasionales (sobre todo, turistas) todavía no está operativa, hay demasiadas bicicletas estropeadas y el sistema no ofrece una información correcta sobre el saldo económico disponible. La empresa que gestiona el servicio reconoce que es "imposible solucionar todas las incidencias", aunque "es algo normal en cualquier sistema de transporte público. Ahora suelen funcionar todas las bases y los problemas puntuales se solucionan en un breve periodo de tiempo".

Los fallos detectados por los usuarios

  • La tarjeta ocasional está inactiva: BiciMad tenía previsto incorporar una tarjeta para usuarios ocasionales (de uno a cinco días de duración), principalmente dirigida a turistas y madrileños que usen la bici por motivos de ocio. Pero actualmente este servicio no está disponible. La concesionaria explica que este tipo de tarjetas "se desactivaron después del pirateo informático que sufrió el sistema, ya que se detectó que los 'hackers' utilizaron un agujero en los medios de pago para lanzar su ataque al sistema". Ahora esperan implantar de nuevo esta tarjeta "en breve", aunque todavía no tienen fecha. Mientras, los usuarios ocasionales no pueden alquilar bicis, a no ser que paguen por el abono anual.
  • Bicis que quedan mal ancladas: Los ciclistas han detectado fallos en el anclaje, con bicicletas que no se quedan bien enganchadas al dejarlas en la estación. Estos errores provocan riesgo de robo, pero también implica que el sistema sigue cobrando al usuario como si todavía siguiera utilizando la bici. En teoría, si la bicicleta está bien anclada debe aparecer una luz verde; si no está bien enganchada, el piloto aparece en rojo. En caso de que haya fallos se recomienda avisar en el teléfono de incidencias (900 505 463). La empresa asegura que estos errores son "puntuales".
  • Problemas para ver el saldo: Los usuarios critican que, en ocasiones, no se refleja correctamente el saldo de dinero que les queda disponible. "A veces da fallos con el saldo. Metes dinero pero te aparece como si no hubieras recargado", advierte Merallo. "El saldo se cobra correctamente, pero no puedes verlo bien por un error del sistema", apunta el colectivo En Bici por Madrid. Por otro lado, en los saldos tampoco se están registrando los descuentos por recoger la bici en una estación con muchos vehículos o por entregarla en una con pocas bicis, según denuncian en Pedalibre.
  • Bicicletas defectuosas: BiciMad pide a los usuarios que avisen al teléfono de incidencias cuando la bicicleta se estropee (por fallos en los frenos o en el sistema eléctrico, por ejemplo). Sin embargo, algunas personas entregan la bici defectuosa sin informar del problema, con lo que el siguiente usuario se encuentra con una bicicleta en mal estado. Para alertar de ello al resto de usuarios, los ciclistas han ideado un sistema de aviso: "Lo tradicional es darle la vuelta al sillín si te toca una bici mala, para avisar a otros, ya que BiciMad no contempla anular las bicis que han sido reportadas como defectuosas", explican desde En Bici por Madrid. Además, los propios ciudadanos están colaborando en "un listado de bicis malas" en Twitter, a través de la cuenta @bicimal.
  • Quejas por el precio: El cobro de la primera media hora (50 céntimos) es una de las principales denuncias de los usuarios, sobre todo al comparar con el resto de ciudades españolas, donde los primeros treinta minutos son gratuitos. "Es muy caro, debería haber una compensación para los usuarios habituales. No te puedes gastar todos los días dos euros en circular con la bici", apunta Merallo. Un usuario que tarde una hora en ir al trabajo en bici y otra en volver a su casa tendrá que pagar 2,20 euros diarios en el alquiler, sin contar el gasto del abono anual. La empresa y el Ayuntamiento decidieron cobrar por los primeros minutos, ya que "así se evita que la bici pública recoja los movimientos cortos que realizan andando muchos ciudadanos". Además, "el abono anual en Madrid es más barato que en otras ciudades".
  • Piden una ampliación hacia el sur: Actualmente BiciMad se circunscribe a los distritos Centro y Retiro, y a barrios próximos a los bulevares. Pero el Ayuntamiento ya tiene planes para extender el servicio hacia el norte, completando el distrito de Chamberí y llegando hasta Cuzco y Nuevos Ministerios. En esa primera ampliación se añadirán 40 nuevas bases y 400 bicicletas. Sin embargo, los usuarios creen que también "sería necesario llevar el servicio hacia el sur, al menos hasta el límite con Madrid Río, ya que en el distrito de Arganzuela hay más cuestas y es ahí donde más falta hacen las bicis eléctricas", según Merallo. El Ayuntamiento asegura que habrá más fases de ampliación, además de la del norte, pero no aporta detalles.
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