Centenares de personas han protestado este miércoles con una sonora pitada contra Ana Botella tras el pregón de las fiestas del Orgullo Gay en la plaza de Chueca de Madrid. Tras la intervención de la cantante Ruth Lorenzo y la ganadora del último festival de Eurovisión, Conchita Wurst, los asistentes al acto han protestado contra las restricciones que ha planteado el Ayuntamiento de Madrid a celebración del Orgullo al grito de “Ana Botella al contenedor” y “Ana Botella, no nos quites el Orgullo”.

La organización del Ogullo tuvo que cambiar la ubicación de las actuaciones que se iban a desarrollar en la plaza de Chueca debido a las limitaciones sonoras impuestas por el Ayuntamiento de Madrid y tuvo que ubicar el escenario en la plaza de Soledad Torres Acosta, cerca de Callao. Sólo el pregón ha podido celebrarse en Chueca, lo que ha causado malestar en diferentes colectivos que participan en las fiestas.

Al límite al ruido se ha referido Ruth Lorenzo, que ha amagado con hablar sin micrófono subida al palco en compañía de la gran estrella de la jornada, Conchita Wurst. La plaza de Chueca se llenó para recibir a Conchita Wurst e incluso algunos balcones lucían pancartas para recibirla con mensajes como “Conchita, we love you”. La cantante austriaca ha hablado muy brevemente (se ha excusado diciendo que no sabe hablar español) para el público, ha agradecido el recibimiento y ha asegurado que estaba encantada de estar en Madrid.

El manifiesto que han leído los organizadores también se ha referido al límite de decibelios que marcó el consistorio. El discurso, leído a dos voces por las presidentas de la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (FELGTB) y del Colectivo de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales de Madrid (COGAM), ha reivindicado la libertad sexual en el mundo y ha criticado los recortes de las administraciones y la "amenaza" sobre la sanidad, que afecta especialmente al colectivo.

Tras ellas, el secretario general de Aegal, Juan Carlos Alonso, ha celebrado con los asistentes que Madrid vaya a ser en 2017 la ciudad donde se celebre el día mundial del Orgullo Gay.

Tras estas intervenciones, tras la protesta contra la alcaldesa y con las fiestas ya inauguradas, la plaza ha ido despejándose en calma y con ambiente festivo.