Desde que Juan Carlos I anunciara su abdicación, muchas preguntas y dudas quedaron en el aire.

Una de ellas es, dado que la proclamación como nuevo rey de España del príncipe Felipe es inminente —este 19 de junio—, quién pasará a presidir y a entregar este 2014 los Premios que llevan y seguirán llevando su nombre, los Príncipe de Asturias.

Una de las respuestas podría ser que él mismo siguiera presidiendo estos premios, creados en 1980. Otra, que pase a primera línea la futura princesa de Asturias, la infanta Leonor. Incluso una última, que cualquier otro miembro de la familia real se hiciera cargo de los galardones.

La Fundación ha confirmado a 20minutos que aún no ha recibido una notificación oficial por parte de la casa real sobre quién será el miembro de la Familia del Rey que se ponga al frente de los galardones. Lo que sí confirma la Fundación es que la fecha de entrega de los ocho premios —falta solo saber quién se llevará el de la Concordia tras galardonar este miércoles al Maratón de Nueva York en los Deportes— se decidirá "a finales de septiembre" y será "en octubre", remitiendo asimismo a la única declaración institucional que se ha producido desde que el rey abdicara el 2 de junio.

Tampoco casa real ha confirmado a este periódico si seguirá siendo don Felipe y su mujer Letizia los que esten al frente de la entrega de los galardones o será otro miembro de la familia real.

Hace apenas una semana, don Felipe expresó su voluntad de continuar al frente de la Fundación Príncipe de Asturias hasta que, en su día, la ahora infanta Leonor, pueda hacerse cargo de una responsabilidad que, aunque honorífica, calificó de "intensa, estimulante e ilusionante". Esto podría ser en cualquier momento, según el grado de preparación y madurez de Leonor, o el día en el que cumpla su mayoría de edad: el 31 de octubre de 2024.

Además de agradecer su "estímulo, respaldo y generosidad" a los 75 patronos de esta fundación que acudieron a la reunión celebrada en el Palacio Real, el Príncipe de Asturias evocó los orígenes de la fundación para recordar, con especial cariño, el discurso —su primero— que en 1981 le dedicó siendo él todavía un niño, el poeta José Hierro, tras recibir el premio de las Letras concedido por la institución. "Un hermoso discurso que, aunque dirigido en su mayor parte a mí, reconozco que no llegué a entender del todo su significado, pues yo era entonces un niño de 12 años", dijo.