Todo ciclista tiene su carrera fetiche. O al menos el palmarés lo sugiere. Una reiteración de éxitos y buenas clasificaciones que, con los años y la perspectiva, acaban generando una asociación inmediata. Tal es el caso del belga Phillippe Gilbert (BMC) con la Amstel Gold Race. Este domingo la ganó por tercera vez (tras 2010 y 2011), sin olvidar que en estas mismas carreteras ganó su título mundial.

La clásica cervecera holandesa, sin ser uno de los monumentos de este deporte, sí tiene mucha tradición por afición, recorrido y ubicación estratégica en el calendario dentro del denominado trípico de las Ardenas. Formó parte de la Copa del Mundo y ahora lo hace del WorldTour. Tras 251 kilómetros y hasta 33 ascensiones,  Gilbert firmó una incontestable victoria en la Amstel lanzando un potente ataque en la ascensión definitiva al Cauberg, a tres kilómetros del final. Un demarraje que le dio continuidad a una primera aceleración de su compañero Samuel Sánchez.

El belga, que viene de estrenar su palmarés en la Flecha Brabançona esta pasada semana, voló hacia la meta sin que desde atrás pudieran atraparle ni  el también belga Jelle Vannendert (Lotto Belisol), el australiano Simon Gerrans (Orica), el murciano Alejandro Valverde (Movistar) o el polaco Michal Kwiatkowski (Omega Pharma). Valverde concluyó cuarto.

Las caídas fueron un factor de eliminación bastante activo en la edición de 2014 y dejaron algunos abandonos ilustres.  La peor parte se la llevaron el español Joaquim Purito Rodríguez (Katusha), el danés Niki Sorensen (Tinkoff Saxo) y el luxemburgués Andy Schleck (Trek) que, sin lesiones graves, tuvieron que abandonar la prueba, lo mismo que el también español Haimar Zubeldia y el irlandés Daniel Martin, vencedor el pasado año de la Lieja-Bastoña-Lieja precisamente ante Purito.

Purito sufría un fuerte golpe en el pecho y fue trasladado a un hospital de la zona donde ocurrió la caída, cuando se llevaban unos cien kilómetros. Un masajista del equipo Katusha fue el encargado de llevarlo al centro médico más cercano para someterlo a unas pruebas y así poder determinar el alcance de la lesión.

En un principio el jefe de prensa del equipo, Philippe, Maertens dijo que era posible que tuviera alguna costilla rota, pero que era pronto para saberlo. Purito Rodríguez no tiene suerte en las clásicas de las Ardenas, especialmente en la Amstel, en la que fue segundo en la edición 2011. En las dos últimas ediciones tuvo que abandonar y en la Lieja-Bastoña-Lieja la fortuna le dio la espalda teniendo que conformarse con el segundo puesto en la clásica que se llevó Daniel Martin.