Este martes, La 1 de RTVE estrenó la nueva temporada de Lazos de sangre. El formato, que repasa la biografía de algunas de las celebridades más icónicas, se centró en María Jiménez. Al igual que en las temporadas anteriores, Boris Izaguirre fue el encargado de dirigir el programa.

Como tertulianos acudieron, por ejemplo, Belinda Washington, Jaime Cantizano y Francisco Rivera Ordóñez. La presencia de este último causó un gran revuelo en redes por parte de quienes consideraron una incongruencia su participación con la manera de pensar que ha demostrado otras veces.

Y es que, el torero ha protagonizado bastantes polémicas por sus declaraciones en Espejo público sobre cuestiones como el machismo o la política, y el episodio de María Jiménez se centró precisamente en eso: el maltrato físico y psicológico que sfrió a lo largo de muchos años por parte de Pepe Sancho.

Rivera encontró muchos paralelismos entre la violencia machista que sufrió Jiménez y la que padeció su madre, Carmina Ordóñez. Para él, la prensa de la época tuvo un papel determinante a la hora de anular los testimonios de las mujeres que denunciaban situaciones de violencia machista, aunque Paloma García-Pelayo puntualizó que la primera en darles la espalda fue la justicia. 

El torero también aprovechó para lanzarle alguna pulla a Isabel Pantoja, que no se ha caracterizado nunca por su buena relación con la intérprete de Se acabó. En una ocasión, el programa proyectó un vídeo que ilustraba a la tonadillera lanzándole una despectiva mirada a Jiménez en un plató, algo que despertó risas entre los colaboradores de Lazos de sangre. 

"Hay miradas que matan y la envidia es muy mala. Es imposible competir con María, y mucho menos… envidiosa, es muy envidiosa. Imagino que vería a María cantar y pensaría '¿Dónde voy yo ahora?' No hay comparación, es como comparar el océano con un charquito", declaró el torero, para añadir después: 

"En Cantora se oyen caminar las ratas", respondió Rivera cuando el presentador quiso saber qué gustos musicales predominaban en Cantora, la finca en la que reside Isabel Pantoja junto a su hermano, Agustín.