La Fundación Aless Lequio, creada por Ana Obregón con el objetivo de cumplir uno de los últimos deseos de su hijo, lleva días en el punto de mira. El equipo de Espejo Público ha llevado a cabo una exhaustiva investigación para intentar saberlo todo acerca de la fundación.
Ante las dudas, la actriz ha puesto a disposición del matinal un certificado del cambio de domicilio de la Fundación, pero un equipo del programa se ha trasladado allí y no hay ni rastro de la organización benéfica.
"Cuando buscamos en el registro y vemos los datos de la fundación, se ve que sigue en tramitación y medio año después sigue apareciendo la dirección de Alcobendas", ha explicado Gema López desde el plató de Espejo Público.
Así, la periodista Laura Fa ha destacado que aún no se ha llevado a cabo el cierre de cuentas de la fundación y será en marzo cuando todo lo generado del libro El chico de las musarañas se traspase directamente a las cuentas de la Fundación Aless Lecquio. Además, Fa ha apuntado que Obregón habría recibido un adelanto de entre 100.000 y 200.000 euros por el libro.
De la misma manera, el matinal ha recalcado que Ana Obregón ha hecho hasta ocho exclusivas en revistas del corazón, por lo que se habría embolsado hasta un millón de euros. Tal como ha explicado Gema López, Obregón aseguró que los beneficios de estas publicaciones también serían destinados a la fundación. Sin embargo, finalmente, la actriz habría decidido emplear este dinero para la crianza de Ana Sandra.
Respecto a las colaboraciones de Ana Obregón con una marca de cosmética, la actriz comunicó que el dinero que ganase de este trabajo también sería destinado a la fundación, pero, después, matizó que sería una "parte" de lo que ganase. "No queda claro si es parte de la totalidad de lo que ella se ingresa por la publicidad o una parte de lo que ella quiere donar a la fundación. Hemos hablado con la marca y dicen que les mandemos un mail", ha señalado Laura Fa.
Por su parte, desde el Club Social de Vamos a ver, Alessandro Lecquio no ha dudado en responder a todas las dudas y acusaciones vertidas acerca de la fundación que lleva el nombre de su hijo: "Las cuentas de la fundación están más que claras. Los fondos de la fundación, que ascienden a una cantidad cercana a los cuatro millones de euros o, incluso, algo más, proceden de una donación que, en su día, gestionó un queridísimo amigo mío".
"Los fondos están formados por una parte en efectivo y por bienes inmuebles, uno de ellos está en la plaza Descubridor Diego de Ordaz, que es donde hemos fijado la sede de la fundación; y otro, en la calle Hermosilla. A partir de ahí, la fundación tiene fondos más que sobrados para su funcionamiento y financiación de los proyectos con los que nos hemos comprometido", ha apuntado Lecquio.
"Hasta ahora hemos financiado dos ensayos que estaban centrados en el sarcoma de Ewing, que era la enfermedad que tenía mi hijo, por un valor de 180.000 euros. Esta donación se hizo a principios del año pasado, más o menos en febrero", ha agregado el conde.
Acerca de Ana Obregón, el colaborador ha sido tajante: "Las cuentas de Ana son de Ana y a mí no me interesan para nada. Las cuentas de la fundación son las cuentas de la fundación y están más que claras. Los únicos que tienen acceso a las cuentas son el tesorero y Ana. A mí, con decirme que las cuentas están claras y saneadas... Una cosa es Ana Obregón y otra es la fundación. La fundación funciona, tiene sus fondos más que claros. Otra cosa es Ana Obregón y sus compromisos adquiridos públicamente".
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