Después de tres intensos meses y tras un complicado duelo con Tom Brusse, finalmente Olga Moreno se ha convertido en la cuarta concursante finalista de Supervivientes 2021 que pasa a la gran final que tendrá lugar este viernes 23 de julio.
Este miércoles, Telecinco emite la primera parte de la final del reality y la expulsión de Tom Brusse del concurso ha estado cargada de emoción y nervios. De hecho, ha estado cerca de padecer un ataque de ansiedad antes de que Jorge Javier Vázquez revelara quién se salvaba y quién se quedaba a las puertas de la gran final.
Abrazar a sus familiares, sobre todo su hija Lola y a David Flores
Parece que Olga Moreno tiene claro cómo va a ser el reencuentro con sus seres queridos cuando termine el programa, tal y como confesó a Melyssa en la isla. "Le voy a dar un abrazo a mi padre… Lo voy a achuchar, achuchar, achuchar... Y a mi madre y a mi hermana", explicaba emocionada.
"Mi marido cuando salió de GH VI' después de tres meses y pico también se llevó como quince minutos abrazado a nuestra hija Lola. Quince minutos, los dos sin hablar abrazados. Pienso hacer exactamente lo mismo. Y mi David abrazándolo... Tiene que estar deseando verme. El niño ya es que es obsesión", añadió.
La malagueña confesaba a su amiga Melyssa que solo estaba pensando en el momento de abrazar a su familia después de 100 días en esta isla de Honduras. Asimismo, todos los finalistas han recibido una carta de uno de sus excompañeros o excompañeras y Marta López ha sido la encargada de enviársela a Olga. "Solo quería ayudar a esos niños para que tuvieran una infancia bonita. ¡Quiero que se entere la gente! No es justo. Es un padre ejemplar", argumentaba emocionada tras leer la carta.
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