Que pase ya este año, por favor. Eso mismo decíamos a finales del año 2020. Una de las frases más repetidas ese año. Un año marcado por el coronavirus, por las restricciones y, sobre todo, por las pérdidas que tuvimos ese año. Lo cierto es que creíamos que el año 2021 iba a ser un año mucho mejor que el anterior. Y es cierto, al menos en parte.

El final del año 2020 vino marcado con aquella primera dosis de vacuna administrada a Araceli. Ahí comenzó el camino de la recuperación de cotidianidad, de lo ordinario. Y no nos faltaba razón. Una campaña de vacunación excelente que nos permitió a mitad de año tener a más de un 70% de la población vacunada contra la Covid-19.

Somos un referente en Europa y eso molesta

Junto con la vacunación, un plan nacional y europeo para afrontar una recuperación económica y social de la manera más robusta y rápida posible. España, no lo olvidemos, será el primer país en recibir los fondos europeos. Y seremos los primeros gracias a la gestión que hemos hecho de la pandemia y de las ayudas dadas a los trabajadores y a las empresas durante el año pasado. Somos un referente en Europa y eso molesta.

Este año que comienza en breve, la sociedad española y madrileña debe dar una paso al frente

Molesta a los patriotas de pacotilla, de pulsera nacional en mano, bandera en mascarilla y cuentas en paraísos fiscales. Esa derecha rancia que este país no ha sido capaz de actualizar y adaptarla al siglo XXI como en el resto de Europa.

Este año que comienza en breve, la sociedad española y madrileña debe dar una paso al frente, convencida y comprometida en apartar al populismo fascista que cada vez se hace más natural, más cotidiano en nuestras instituciones. Y Madrid no debe ser una excepción.

Solo quedará un año para que Madrid vote por el cambio

Mientras el partido conservador alemán expulsará a los miembros que pacten con la ultraderecha, en Madrid tenemos a un PP que saca pecho por pactar con quienes vienen a romper con los principales pilares de la democracia y de la convivencia.

La aritmética parlamentaria es la que es y Ayuso tiene alternativas. Ojalá las explore el año que viene, por el bien de esta comunidad. Si no es así, tranquilidad. Solo quedará un año para que Madrid vote por el cambio. Y estaremos listos para ese reto.