Las autoridades sanitarias han cambiado la estrategia sobre la gripe A. Este año no existe: "Nos encontramos ante una gripe estacional en la que circulan diferentes tipos de virus". La teoría negacionista ha reemplazado al exceso mediático de 2010. Pero la versión de Sanidad contradice los datos oficiales. El mapa de la gripe en la Península –actualizado por la Red de Vigilancia de la Gripe en España– destaca la presencia del tipo dominante H1N1: el virus de la gripe A.

"Sanidad niega la enfermedad para evitar el pánico social, pero se equivoca al desmentir su existencia". El responsable de Salud Pública de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia, Fernando Pérez Escanilla, da las claves: la cepa H1N1 es el virus dominante de esta temporada, pero la enfermedad es limitada este año porque la población susceptible de padecer los síntomas ya ha superado la enfermedad o ha sido vacunada.

La estrategia de ocultismo oficial y las competencias transferidas dificultan el acceso a los datos globales sobre la incidencia de la enfermedad, pero este virus ya se ha cobrado las dos primeras víctimas mortales de esta temporada en Cataluña –dos hombres de 42 y 56 años–. Navarra registró la semana pasada cinco casos positivos –dos de ellos de gravedad– y Asturias ha notificado hasta 23 casos graves que requirieron hospitalización.

Pese a la gravedad de los casos descritos, el índice de afectados es todavía muy bajo –40,39 enfermos por cada 100.000 habitantes – respecto al año pasado, cuando fallecieron 271 personas . El jefe del servicio de Medicina Preventiva del Hospital Carlos III, Juan Martínez Hernández, relaciona estos anoréxicos datos estadísticos con el protocolo extraoficial de no valorar la gripe A.

"Los profesionales evitan diagnosticar este virus porque es un papeleo ingente. Además, en muchos hospitales no está permitido solicitar la prueba de confirmación de la enfermedad si el caso no requiere hospitalización". Esta práctica adelgaza estadísticas, pero es peligrosa. "El éxito de la recuperación de gripe A depende de la rapidez del diagnóstico. El retraso en el tratamiento de un hombre de mediana edad, diabético y con problemas congénitos, puede ser letal", matiza Martínez.

La vacuna de la gripe de esta temporada 2010-2011 es trivalente: contiene tres antígenos correspondientes a tres tipos de virus gripales. La antigua cepa A (H1N1) se ha eliminado de la vacuna y se ha sustituido por la nueva cepa pandémica causante de la práctica totalidad de los casos de gripe en 2010. La vacuna contiene además una cepa A (H3N2) circulante desde hace décadas y una cepa tipo B.