El rosa chicle, los tonos pastel y la ingenuidad infantil al estilo Lolita se apoderan de los desfiles de moda de Bangkok. La Elle Fashion Week 2005, que se prolongará hasta el domingo, exhibió ayer encajes, como uno de los elementos destacados de la pasarela, que tan pronto formaban pequeños pantalones como adornaban gabardinas. Este elemento ha dejado de ser exclusivo de las mesas camilla de las abuelas para convertirse en la propuesta más in del mercado de la moda.
Globos y ositos
Las diminutas blusas, a modo de sinuosos sujetadores, fueron otro de los elementos destacados ayer, en una escenografía donde las modelos desfilaban como colegialas ingenuas acompañadas de globos de colores, piruletas multicolores y muñecos de peluche. Otro elemento de contraste fueron los gorros y las faldas de corte clásico, combinadas con recargados sujetadores.
Fieles a la cultura oriental, no faltaron los diseños de trajes de chaqueta inspirados en los tradicionales quimonos, elaborados con tejidos que simulaban trabajos de papiroflexia.
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