Modificar el horario lectivo para evitar las horas de mayor calor, reforzar las plantillas de los hospitales o intensificar la frecuencia en Metro de Madrid. Estas son algunas de las medidas que contempla el Plan de Actuación ante Episodios de Altas Temperaturas de la Comunidad de Madrid para prevenir los efectos nocivos que puede tener en la población. El protocolo se aplicará desde este martes hasta el 15 de septiembre. Durante este tiempo se monitorizará la temperatura de la región y, en función de los datos, se irán adoptando estos puntos.
"El plan sirve para prevenir los efectos de las olas de calor, especialmente en las personas más vulnerables, como mayores o niños", ha expuesto el portavoz del Ejecutivo autonómico, Miguel Ángel García, este martes tras el Consejo de Gobierno. Una comisión interdepartamental formada por personal de todas las Consejerías hará un seguimiento de las condiciones climáticas para activar las acciones necesarias en cada una de las áreas, como educación, servicios sociosanitarios o transporte público. Además, el observatorio para la vigilancia y control de las olas de calor avisará sobre las alertas y monitorizará los efectos que genera en la salud de los ciudadanos.
El protocolo contempla que los colegios e institutos puedan modificar su horario lectivo para evitar las horas de mayor calor. Con ello, cada centro podrá decidir si reorganiza las clases para evitar que educación física, las excursiones o las actividades extraescolares se produzcan durante los momentos centrales del día, cuando hay más sobreexposición solar. Para mejorar las condiciones dentro de las aulas, el Gobierno regional planea instalar persianas, toldos y estores para disminuir la incidencia de los rayos solares y así disminuir la temperatura. Asimismo, en los colegios que imparten etapas educativas de 0 a 3 años se colocarán ventiladores y se han instalado ya 11 unidades de suelo radiante en escuelas infantiles para controlar la refrigeración.
En las instalaciones sociosanitarias se controlará especialmente la climatización y se vigilará a los pacientes de alto riesgo, mayores de 65 años o con ciertas patologías durante los episodios de alerta por altas temperaturas. En los espacios abiertos se colocarán elementos de protección para combatir el sobrecalentamiento. El personal de las residencias y centros de día supervisarán la correcta hidratación de estas personas y se evitará la exposición solar durante las horas centrales del día. En todos los centros, ya sea de media o larga estancia, se hará un seguimiento personalizado de los usuarios.
Por su parte, los centros de salud monitorizarán a la población con problemas cardiacos, de diabetes, renales, hipertensión u otras patologías para ofrecer consejos preventivos sobre alimentación, hábitos, rutinas e hidratación. A través de mensajes en el teléfono móvil podrán recibirse estas pautas y recomendaciones sobre cómo actuar ante síntomas relacionados con golpes de calor.
Durante los niveles de alerta medios y elevados, la administración regional reforzará la plantilla de los hospitales o zonas de la región más afectados, por tener un volumen de población más vulnerable. El personal de Urgencias recibirá la adecuada formación para saber actuar. El protocolo también contempla ampliar el número de camas disponibles, para tener capacidad de actuación ante cualquier situación inesperada, cuando se den este tipo de condiciones climáticas.
Aumentar marquesinas en las paradas de bus
Otro de los puntos que se incluye en el plan contra las altas temperaturas está relacionado con el transporte público. Metro de Madrid intensificará la frecuencia de viajes para que el pasajero tenga que esperar menos en los andenes. La temperatura de los vagones se controlará para que se mantenga entre los 21 y 26 grados y que los pasajeros puedan viajar de manera confortable. De forma paralela, el Ejecutivo autonómico está poniendo marquesinas en las paradas de autobús para que dispongan de zonas de sombra donde resguardarse. Ahora, se ha intensificado su instalación, pasando de 30 nuevos al mes a 48, con el fin de anticiparte a los meses de mayor calor.
El Gobierno regional también contempla la necesidad de desplegar campañas para concienciar a los madrileños sobre el consumo de agua. Desde el Canal de Isabel II se ofrecerá información para evitar que se desperdicie este recurso escaso que se consume más durante la época estival. De cara a estos meses, las piscinas de la región abrirán al público desde este miércoles hasta el próximo 15 de septiembre.
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