La Audiencia Provincial de Ciudad Real juzgará el próximo martes a un joven de 25 años que raptó a su expareja en la capital ciudadrealeña y la llevó a Puertollano, donde la tuvo retenida cuatro días en una vivienda, mientras la agredía, para el que fiscal pide siete años de prisión.
Según el escrito de acusación del fiscal, los hechos ocurrieron el 10 de agosto de 2021, primero en Ciudad Real capital, donde el procesado sorprendió a su expareja cuando salía de un establecimiento chino y la obligó a subir a un vehículo que conducía un amigo del acusado.
El joven sabía que estaba vigente una medida de protección que le impedía acercarse a menos de 300 metros de la víctima, a pesar de lo cual golpeó a su expareja y la introdujo en el vehículo a la fuerza.
Después la llevó contra su voluntad a una vivienda de Puertollano, que era propiedad de la familia de la víctima, donde la tuvo retenida por espacio de cuatro días, entre el 10 y el 14 de agosto de 2021, en los que la agredió dándole golpes en el cuerpo, golpeándola con un ladrillo en un tobillo y con una goma de butano en la pierna izquierda.
Además de ocasionarle lesiones, el acusado ocultó a su expareja cuando la Policía fue a la vivienda a buscarla, hasta que la mujer pudo escapar aprovechando que el raptor estaba durmiendo, según mantiene el representante del ministerio público.
El fiscal lo considera autor de un delito de detención ilegal, por el que solicita que sea condenado a cinco años y tres meses de prisión y de un delito de maltrato en el ámbito de la violencia de género, por el que demanda una pena de un año de prisión. También lo acusa de un delito de quebrantamiento continuado de medida cautelar, por el que pide que sea condenado a nueve meses de prisión.
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