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Carmen Moreno, jefa de sección de Psiquiatría en Hospital Gregorio Marañón: "El trastorno bipolar no define a la persona"

  • A pesar de los avances, los estigmas y la falta de comprensión rodean a este trastorno cuyo día se celebra hoy.
Carmen Moreno, jefa de sección de Psiquiatría en el Instituto de Psiquiatría y Salud Mental del Hospital Gregorio Marañón de Madrid.
Carmen Moreno, jefa de sección de Psiquiatría en el Instituto de Psiquiatría y Salud Mental del Hospital Gregorio Marañón de Madrid.
CEDIDA
Carmen Moreno, jefa de sección de Psiquiatría en el Instituto de Psiquiatría y Salud Mental del Hospital Gregorio Marañón de Madrid.

El trastorno bipolar, a pesar de haber ganado mayor concienciación en los últimos años, sigue siendo un campo de estudio vasto y complejo en la psiquiatría. Aunque se ha avanzado considerablemente en la comprensión de sus mecanismos neurobiológicos y en el desarrollo de tratamientos efectivos, aún quedan numerosos aspectos por descubrir. Por ejemplo, los factores genéticos y ambientales que contribuyen a su desarrollo aún no se comprenden completamente, y existe una necesidad continua de identificar biomarcadores específicos que faciliten un diagnóstico temprano y preciso. Además, persisten interrogantes sobre la variabilidad en la presentación clínica del trastorno bipolar y cómo factores como el estrés, el sueño y la dieta pueden influir en su curso y pronóstico.

A pesar de los avances en la concienciación sobre el trastorno bipolar, cuyo día internacional se celebra cada 30 de marzo coincidiendo con el nacimiento de Vincent Van Goghlos estigmas y la falta de comprensión aún rodean a esta enfermedad mental. Las personas afectadas a menudo enfrentan discriminación y dificultades para acceder a tratamientos adecuados debido a la falta de educación y a la persistencia de prejuicios sociales. Romper estos estigmas y fomentar una comprensión más profunda del trastorno bipolar son pasos esenciales para mejorar la calidad de vida de quienes lo tienen y para promover un enfoque más empático y compasivo hacia la salud mental en la sociedad en general.

Hablamos sobre todo ello con la doctora Carmen Moreno, jefa de sección de Psiquiatría en el Instituto de Psiquiatría y Salud Mental del Hospital Gregorio Marañón de Madrid

¿Cuáles son los síntomas más comunes asociados con el trastorno bipolar y cómo se diferencian de otros trastornos del estado de ánimo?El trastorno bipolar es un trastorno crónico que afecta a los mecanismos que regulan el estado de ánimo que se presenta como episodios recurrentes de depresión (tristeza, desesperanza, pérdida de placer, inhibición, enlentecimiento) y de manía (euforia, exaltación del ánimo, irritabilidad, aumento de energía) o hipomanía (euforia más leve). Estos cambios en el estado de ánimo, además de al nivel de energía, pueden afectar al sueño, al comportamiento, la capacidad de pensar con claridad o el juicio.

La frecuencia de los cambios en el estado de ánimo puede variar, desde ser infrecuentes a ocurrir varias veces por año. Aunque algunas personas pueden recuperarse totalmente tras los episodios de manía o depresión, lo habitual es que persistan algunos síntomas anímicos en los periodos entre episodios.
Esta alternancia entre los episodios de depresión y los de manía o hipomanía es lo que diferencia el trastorno bipolar de otros trastornos del estado de ánimo, como la depresión, en la que no aparecen episodios de exaltación del estado de ánimo. 

¿Cuáles son las principales señales que pueden hacer sonar las alarmas?Aunque casi la mitad de los casos de trastorno bipolar aparecen antes de los 18 años, es habitual que se diagnostique cuando ya lleva presente varios años. A pesar de que hay múltiples causas ligadas a esto, una de las más importantes es que es muy frecuente que la primera manifestación del trastorno bipolar sea la depresión, pero solo es posible hacer el diagnóstico de trastorno bipolar cuando ha habido un episodio de manía (o de hipomanía si ha habido también al menos un episodio de depresión). Además, estos episodios de depresión que ocurren en personas jóvenes muchas veces quedan enmascarados y las personas que los padecen no siempre acuden al médico a pedir ayuda.

Es difícil diferenciar las depresiones bipolares y no bipolares. Un primer episodio depresivo a edad temprana y la presencia de historia familiar de trastorno bipolar son los signos de alerta más importante que deben tenerse en cuenta para la detección precoz del trastorno bipolar. La depresión grave con síntomas psicóticos o la que aparece en el posparto también deben alertar de la posibilidad de trastorno bipolar. 

¿Cuáles son los desafíos más significativos que enfrentan las personas diagnosticadas con trastorno bipolar en su vida diaria?Las personas con trastorno bipolar necesitan mantener una vida ordenada que ayude a prevenir las recaídas. A menudo esto supone una dificultad y un cambio respecto a la rutina vital previa, pero es una de las estrategias que, junto con una toma regular del tratamiento farmacológico adecuado, más impacto pueden tener en la estabilidad clínica. Aprender sobre la enfermedad, tener un estilo de vida regular, dormir el tiempo adecuado cada día, no consumir tóxicos, aprender estrategias para manejar el estrés y escuchar a personas de confianza que puedan alertar sobre síntomas de descompensación pueden facilitar la estabilidad clínica y funcional.

Los desafíos en trastorno bipolar actuales pasan por profundizar en cuáles son los mecanismos cerebrales subyacentes y en descubrir estrategias personalizadas de diagnóstico y tratamiento. Hasta entonces, es necesario aprovechar lo mejor posible las herramientas disponibles, muchas de ellas seguras y eficaces, haciéndolas accesibles a nuestros pacientes, involucrando a su entorno de la manera más adecuada en cada caso y haciendo especial énfasis en prolongar los periodos entre episodios (eutimia) y la prevención de recaídas.   

Es muy frecuente que el término bipolar se use en situaciones que nada tienen que ver, lo que aumenta el estigma 

¿Hay estigmas alrededor de la bipolaridad? ¿Cuáles son los más injustos?Es muy frecuente que el término bipolar se use en situaciones que nada tienen que ver con el trastorno, lo que aumenta el estigma en torno al problema. Algunas de estas situaciones son asociar el trastorno bipolar a conductas violentas o peligrosas, pensar que es intratable o que tiene inevitablemente mal pronóstico, considerarlo un problema temporal o del carácter o considerar como causa exclusiva situaciones traumáticas o externas. El trastorno bipolar es una enfermedad con una base biológica, aunque puede verse afectada por factores externos, no asociada a la violencia y que puede estabilizarse y llegar a tener buen pronóstico con tratamiento, aunque requiere que sea prolongado, muy frecuentemente durante toda la vida.

¿Considera que la bipolaridad puede tomarse menos en serio por la caricatura que en ocasiones se realiza de ella en obras de ficción?Es frecuente que en medios de ficción se representen casos extremos del trastorno bipolar que están lejos de ser lo habitual en personas con esta enfermedad. Estos estereotipos con frecuencia están asociados a la violencia y la dificultad de vivir en sociedad, y en otras ocasiones a la creatividad y la genialidad incomprendidas, y contribuyen a la falta de comprensión de este trastorno, así como las dificultades y necesidades de las personas que lo padecen. El papel de los medios de comunicación en la difusión de información veraz y adecuada es clave para mejorar la percepción y la integración social de las personas con enfermedad mental grave.

¿Cómo afecta el trastorno bipolar a la capacidad funcional y la calidad de vida de quienes lo padecen?El trastorno bipolar es episódico y el pronóstico empeora con cada recaída. Por tanto, mantener la situación de estabilidad clínica y evitar la a aparición de nuevos episodios es clave para evitar el deterioro funcional. Otro aspecto clave en el trastorno bipolar que está directamente relacionada con la funcionalidad y que, a largo plazo, determina la adaptación psicosocial del paciente, es la cognición. Las funciones cognitivas como la atención, la memoria, o la capacidad para planificar o priorizar, que son fundamentales para poder mantener una vida activa y para ser capaz de desarrollar la actividad laboral y social, se ven afectadas en el trastorno bipolar y empeoran también con el número de recaídas.

¿Cuál es el impacto del trastorno bipolar en las relaciones interpersonales, tanto familiares como sociales?En los periodos de manía o de depresión, los síntomas clínicos, especialmente cuando son graves, suponen un importante impacto en la capacidad funcional de las personas con trastorno bipolar, afectando tanto a sus actividades de la vida diaria, como a las relaciones que mantiene a nivel social o familiar, e incluso a la percepción que tienen de ellas mismas. Esto hace que sea necesaria una intervención a nivel global para mejorar la capacidad funcional y que, en fase de estabilización clínica, la prevención de recaídas sea fundamental para evitar el deterioro funcional de la persona diagnosticada de trastorno bipolar.

¿Qué enfoques de tratamiento son más eficaces para manejar los síntomas del trastorno bipolar y mejorar la calidad de vida de los pacientes?El tratamiento con fármacos es imprescindible, aunque a veces es necesario complementarlo con una intervención psicológica. Los fármacos se usan tanto para tratar los episodios de manía o depresión como para evitar la aparición de nuevos episodios una vez que el paciente se encuentra estable, por lo que deben tomarse incluso en ausencia de síntomas. Este es uno de los principales retos del tratamiento del trastorno bipolar. Muchos pacientes consiguen la estabilidad clínica y la mejoría en el funcionamiento y en la calidad de vida manteniendo un tratamiento farmacológico adecuado y un estilo de vida ordenado.

A pesar de esto, las situaciones en las que el nivel de estrés y de estimulación ambiental aumentan suponen un aumento del riesgo de descompensación clínica. Los acontecimientos con una intensa repercusión emocional, tanto positiva como negativa, pueden tener especial impacto. En estos momentos es importante evitar olvidos o abandono del tratamiento farmacológico, evitar el consumo de tóxicos y poner en marcha estrategias que faciliten la regulación de la vida diaria, especialmente de las funciones básicas como el sueño. 

Desgraciadamente, aún es frecuente que los empleadores tengan reticencias para contratar a personas con trastornos mentales

¿Cómo puede afectar el trastorno bipolar la capacidad laboral y la vida profesional de una persona?Cuando una persona con trastorno bipolar se encuentra estable clínicamente puede desarrollar cualquier tipo de trabajo. No obstante, es recomendable evitar aquellos trabajos que alteren el ritmo de sueño o que no permitan un descanso adecuado, circunstancias que pueden precipitar descompensaciones. Sin embargo, en personas con descompensaciones frecuentes o que tiene importante impacto sobre la cognición, el desempeño laboral se ve comprometido.
Desgraciadamente, aún es frecuente que los empleadores tengan reticencias para contratar a personas con trastornos mentales como el trastorno bipolar, puesto que las asocian con conflictividad, y mayor probabilidad de absentismo. La dificultad para encontrar empleo o para poder desempeñarlo en condiciones que favorezcan la estabilidad clínica, tiene a su vez tiene impacto negativo en la recuperación funcional de estas personas.

¿La bipolaridad puede llegar a ser incapacitante? ¿De qué manera?En momentos de crisis el trastorno bipolar puede resultar incapacitante, disminuyendo o imposibilitando la capacidad para llevar a cabo las actividades de la vida diaria o incluso para tomar decisiones. Una persona en situación de descompensación puede encontrarse extremadamente triste o, por el contrario, sentirse extremadamente eufórica o capaz y en ambos casos puede llevar a cabo conductas de riesgo. En estos momentos es fundamental buscar ayuda. No obstante, incluso en situación de estabilidad clínica, el trastorno bipolar es una de las principales causas de incapacidad a nivel mundial, ya que con frecuencia las personas en situación de eutimia o remisión presentan un nivel de funcionamiento y bienestar menor al que tienen otras personas con enfermedades crónicas e incluso con otros trastornos del estado de ánimo.

¿Qué recursos y apoyos están disponibles para las personas con trastorno bipolar que experimentan discapacidades como resultado de su condición?Las personas con trastorno bipolar precisan tratamiento continuado a lo largo de su vida. En aquellos casos con más frecuencia y gravedad de las descompensaciones y con mayor deterioro de sus capacidades cognitivas y de sus habilidades para la autonomía personal, es necesario un tratamiento más intensivo por parte de los servicios de salud mental, y un abordaje multidisciplinar en el que también se pueda contar con recursos sociales de apoyo.

¿Cómo puede la sociedad en general y las instituciones de salud mental específicamente mejorar su respuesta y apoyo a las personas con trastorno bipolar y discapacidades asociadas?Uno de los aspectos fundamentales es promover la detección precoz, lo que incluye favorecer el diagnóstico en etapas tempranas de la vida como la adolescencia. La promoción y protección de la salud mental en el trabajo, es otro aspecto fundamental para favorecer la recuperación funcional y la integración social.

¿Qué consejos o recomendaciones ofrecería a las personas que viven con trastorno bipolar y enfrentan desafíos de discapacidad como resultado de su condición?Es fundamental conocer la enfermedad, auto observarse, hacerse experto y aprender a convivir con ella. El trastorno bipolar es una condición crónica, pero no define a la persona. Aprender cuáles son los determinantes de las descompensaciones y las mejores estrategias de regulación es fundamental para disminuir el número de episodios y mejorar la recuperación funcional y la calidad de vida.

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