Hace pocos días se conocía la sentencia que por la que la Audiencia de Barcelona condenaba a los paparazzi Diego Arrabal y Gustavo González a diez meses de cárcel y 1.400 euros de multa por intentar lucrarse con fotos de la periodista Mariló Montero en topless.

La sentencia también condena a los dos paparazzi a diez meses de suspensión para el ejercicio de su actividad relacionada con la prensa, y dejaba en manos de la vía civil una eventual indemnización a la querellante.

Montero y su amiga se alojaron el 29 de marzo de 2015 en un bungaló del hotel en Bora Bora, con acceso a una playa privada y fue allí donde se hicieron las fotografías, sin que ella lo supiera. 

Ahora, Diego Arrabal, ha asegurado que no se va a quedar "con los brazos cruzados" ante la sentencia. "Lucharé, lucharé y lucharé", aseguraba en un mensaje en X (Twitter). 

"Cómo no voy a estar indignado... Me condenan por revelación de secretos por tener una agencia y recibir unas fotografías realizadas en una playa privada...", recuerda en el mensaje el paparazzi, que a continuación sube una imagen de la supuesta playa donde se hicieron las fotos, Matira, en la que pone "Matira. Plage Publique", o lo que es lo mismo, "Matira. playa pública", en francés, el idioma oficial en Bora Bora. 

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"Y resulta que este es el cartel que hay en dicha playa de Bora Bora", dice el periodista, por lo que en ese caso las imágenes se habrían tomado en un lugar público y serían válidas según la jurisprudencia. Sin embargo, hay quien apunta a que Matira es una playa que sí tiene zonas de playa privadas, por lo que dónde se hicieron las fotos sería determinante.