El Tribunal Supremo ha confirmado la segunda condena de inhabilitación impuesta al expresidente catalán Quim Torra por un delito de desobediencia, por desoír una orden que le obligaba a retirar una pancarta con el lazo amarillo en la Generalitat, lo que ya le costó el cargo en septiembre de 2020.

Quim Torra no ostenta ahora ningún cargo político, si bien la sentencia le puede impedir concurrir a los próximos comicios autonómicos previstos para 2025, en caso de querer postularse.

Se trata de la segunda condena que el Supremo ratifica a Torra una vez que el alto tribunal ya confirmó en septiembre de 2020 la condena de año y medio de inhabilitación, por desobedecer de forma "contumaz y obstinada" a la Junta Electoral Central que le obligó a retirar las pancartas de apoyo a los presos del "procés" de edificios públicos en las elecciones del 28 de abril de 2019.

Y ahora la Sala de lo Penal confirma una segunda condena a 15 meses de inhabilitación y 24.000 euros de multa, por no cumplir el requerimiento que le hizo el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña en septiembre de 2019 para retirar una pancarta en favor de presos políticos de la fachada del Palau de la Generalitat.

El alto tribunal destaca que el recurso no ha acreditado interés casacional, por lo que procede su inadmisión. Añade que la Audiencia Provincial, al confirmar la sentencia inicial del Juzgado de lo Penal número 6 de Barcelona, descartó la existencia de vulneración de derechos fundamentales alegada por Torra, sin que se aprecie irracionalidad o arbitrariedad en su decisión.

El juicio se celebró sin la presencia del expresidente catalán, que poco antes de la vista oral anunció a través de su cuenta de Twitter (ahora X) que no participaría en una "farsa".