Granados aporta informes para demostrar que la Comunidad no espió a Gallardón

  • El consejero de Interior ha presentado documentos y fotografías para demostrar que no hubo seguimientos a Gallardón y Cobo.
  • Los documentos muestran que el dispositivo de seguridad estaba en la Consejería de Familia, donde había un encierro de trabajadores.
El consejero Granados muestra varias documentos para demostrar que no hubo seguimientos a Gallardón y Cobo.
El consejero Granados muestra varias documentos para demostrar que no hubo seguimientos a Gallardón y Cobo.
Fernando Alvarado / EFE
El consejero Granados muestra varias documentos para demostrar que no hubo seguimientos a Gallardón y Cobo.

El consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Francisco Granados, ha presentado este lunes varias pruebas documentales y fotográficas para demostrar que los supuestos seguimientos al alcalde y al vicealcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón y Manuel Cobo, son "absolutamente falsos".

En la sede del Gobierno regional, el consejero ha mostrado a los periodistas unos informes de los técnicos del servicio de seguridad privada de la Consejería de Presidencia que muestran cómo los días 27 y 28 de mayo de 2008 el dispositivo de seguridad de la Comunidad de Madrid se encontraba en la Consejería de Familia, donde había un encierro de trabajadores.

Durante estos días, según publica El País, "los espías de la Consejería de Interior de Madrid con su director general, Sergio Gamón, al frente, cercaron el Palacio de Comunicaciones de Madrid, sede de los despachos del alcalde y del vicealcalde madrileño, Alberto Ruiz-Gallardón y Manuel Cobo, respectivamente".

"Absolutamente falsos"

Granados, sin embargo, ha aportado pruebas que muestran que estos seguimientos "son absolutamente falsos" y que se trata de "una información manipulada que no corresponde a la realidad", fruto de un año de campaña "de acoso y derribo" al Gobierno regional y "de justificar algo que no ha ocurrido: un supuesto montaje de espionaje a compañeros y miembros del PP".

Entre las pruebas documentales mostradas también figura una denuncia de la Guardia Civil a raíz de un intento de agresión a un agente del cuerpo durante el encierro de trabajadores en la Consejería de Familia, situada en el número 63 de la calle de Alcalá, frente a la sede del Ayuntamiento de Madrid.

Esta denuncia también aparece reflejada en el informe de los técnicos de seguridad supuestamente implicados en el espionaje que demuestra que el 27 y el 28 de mayo de 2008 estaban en la citada Consejería y no siguiendo al alcalde de Madrid y al vicealcalde de la ciudad.

"La gota que colma el vaso"

Lo que hoy publica El País "es la gota que colma el vaso de la campaña de acoso y derribo" al Gobierno regional, ha dicho Granados, que ha asegurado que en los días citados había más de 50 ó 60 personas que pueden acreditar que los técnicos de seguridad estaban allí con motivo del encierro de trabajadores.

Estos testigos -ha continuado el consejero- son miembros de la Guardia Civil, del Ministerio de Interior, de la Policía Nacional, sindicalistas y la entonces consejera de Familia, Gador Ongil.

"No sé si alguien duda de qué interés va a tener la Comunidad de Madrid en seguir al señor alcalde (Ruiz-Gallardón) cuando ese día, si no recuerdo mal, estaba en un juicio, creo que contra un periodista de la Cope (Federico Jiménez Losantos), y por tanto poco hacían los técnicos de Seguridad en la puerta del Ayuntamiento viendo si entraba o salía", ha explicado Granados.

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