El príncipe de Gales, que desde hace unos días está volviendo poco a poco a la normalidad de su agenda, presidió el pasado fin de semana en Londres la entrega de los premios de cine Bafta, a la que siempre ha ido con su mujer, Kate Mddleton.
Esta vez, debido a la larga baja médica a la que se enfrenta Kate por una cirugía abdominal, ha tenido que acudir solo, aunque charló amigablemente con muchos actores allí presentes, nomiados y no.
Tras saludar a los directores de la Academia del Cine Británico, el príncipe heredero se disculpó por la ausencia de la princesa de Gales. "Siento que Catherine no haya podido venir. Ella ama los Bafta", aseguró.
"Todas las películas nominadas que veo siempre es con ella. Las vemos juntos". Sin embargo, y tal como admitió él mismo, en 2024 las cosas están siendo distintas. "Este año ha sido el que menos películas he visto. Tengo otras cosas en la cabeza", aseguró el príncipe, haciendo referencia al problema médico de su mujer, y al diagnóstico de cáncer de su padre, el rey Carlos III.
Guillermo está alternando actos protocolarios con la atención de sus tres hijos, que además, acaban de comenzar las vacaciones de invierno y se encuentran en su casa de Adelaide Cottage, junto a su madre.
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