El contrato que publicó recientemente la Consejería de Vivienda, Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid para diseñar la futura estación de la línea 9 (L9) de metro que dará servicio a los desarrollos urbanísticos de Los Ahijones y Los Berrocales, al este de la capital, ha quedado desierto. Así lo acredita el acta de la mesa de la licitación que se reunió el pasado lunes por la mañana.
Este órgano de contratación constató que ninguna empresa se había mostrado interesada en el proceso que comenzó el pasado 26 de enero con la publicación de un anuncio en el Portal de Contratación de la Comunidad. El plazo que se dio para registrar las ofertas expiró el pasado 8 de febrero a las 23.59 horas, apenas 15 días después de la apertura. El limitado margen que tuvieron las empresas para analizar los documentos del contrato y postularse ha podido influir en la ausencia de propuestas.
Los pasos que seguirá la consejería que dirige Jorge Rodrigo a partir de ahora son, de momento, una incógnita. Pero fuentes del departamento de Transportes indican a 20minutos que se van a estudiar "las mejores opciones de movilidad" para los vecinos que residirán en estos barrios.
Está por ver hasta qué punto esta ausencia de interés de las empresas en la licitación supone cambios en la planificación que había hecho el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso respecto a la nueva estación de la L9. La hoja de ruta pasaba por encargar el diseño del contrato a lo largo de la primavera para que la empresa adjudicataria diseñara el proyecto constructivo durante algo más de un año (14 meses). Después se harían las obras pertinentes con la vista puesta en 2029, que es la fecha de puesta en funcionamiento que baraja el Ejecutivo regional.
Los estudios que se han realizado en el seno de la consejería que lidera Jorge Rodrigo sitúan la parada en la Gran Vía del Sureste, en un punto entre los futuros barrios de Los Ahijones y Los Berrocales, y en superficie. Además, la estación se plantean como una suerte de intercambiador en el que coincidan diversas modalidades de transporte debido a su "escasa cobertura" al estar "muy alejada" de las ubicaciones previstas para la población y el empleo de los nuevos desarrollos.
El recurso de Rivas
La ausencia de ofertas al contrato no es el único frente abierto en torno a este proyecto: el Ayuntamiento de Rivas-Vaciamadrid recurrió la semana pasada la licitación en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) argumentando que su puesta en marcha supondría "un deterioro muy significativo" del servicio para sus vecinos.
Ese menoscabo vendría dado, según el Consistorio ripense, porque la futura estación suponía el traslado hasta este punto del transbordo que actualmente se hace en Puerta de Arganda. En esta parada de la red del suburbano hay una conexión del Cercanías, por lo que los usuarios de Rivas y Arganda del Rey que quisieran subirse a un tren del servicio de Renfe, además de en la estación de Ahijones-Berrocales, tendrían que apearse de nuevo en Puerta de Arganda para tomar cambiar de medio de transporte, invirtiendo más tiempo en sus desplazamientos.
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